Cómo balancear la dieta según el grupo sanguíneo
Aunque no lo creamos, el grupo sanguíneo juega un papel importante en la alimentación. Veamos de que manera debemos balancear nuestra dieta teniendo en cuenta esta clasificación.
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Los grupos sanguíneos y la alimentación
Pareciera cosa de extravagantes fanáticos de asuntos médicos, pero se trata de algo mucho más natural y cotidiano de lo que imaginamos: nuestro grupo sanguíneo afecta la manera en la que procesamos los alimentos, por lo que hay dietas que son más beneficiosas para un determinado grupo sanguíneo.
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En teoría, el grupo sanguíneo modifica el funcionamiento general del organismo. Por ello, hay grupos de sangre que son más propensos a sufrir ciertas enfermedades o a presentar determinadas carencias alimenticias. Por ello, presta atención a continuación para conocer más sobre los alimentos que favorecen a determinados grupos de sangre.
El grupo sanguíneo A requiere de un alto consumo de frutas y vegetales frescos, y también debe consumir mayores cantidades de cereales y legumbres. Se ve ampliamente favorecido por la práctica de actividades físicas livianas, y presenta algunas restricciones que debemos tener en cuenta: se debe limitar el consumo de pescado fresco, carnes rojas, leche y derivados lácteos, y alimentos pre-cocidos. En cambio, se ve ampliamente favorecido con el consumo de soja y sus derivados.
El grupo sanguíneo B requiere de una dieta muy equilibrada y completa. Se beneficia del consumo extensivo de frutas y vegetales frescos (en especial de los de hoja verde), y también del consumo (aunque no excesivo), de carnes rojas. Sin embargo, debiera evitar la ingesta de carnes blancas, como el cerdo y el pollo. Los lácteos, derivados y huevos frescos, son indispensables en su dieta, a diferencia de los frutos secos y las semillas, que es mejor evitarlas o consumirlas en baja cantidad.
El grupo de sangre AB debe limitar o restringir el consumo de carnes rojas, alimentos en base a harinas procesadas (en especial de harina de trigo), y debe dejar en el olvido el consumo de encurtidos y pimientas de todo tipo. En cambio, se ve beneficiado por el consumo de pescados, mariscos, lácteos y derivados lácteos, frutas y vegetales frescos, en especial el tomate y las frutas tropicales en su mayoría, y grasas vegetales, en especial el aceite de oliva y la manteca fresca de base vegetal.
"El grupo sanguíneo O requiere de un alto consumo de frutas frescas y vegetales. Necesita del consumo de carnes rojas, aunque magras y en su justa medida, y de pescados y mariscos, evitando la carne de cerdo y los embutidos."
El grupo sanguíneo O requiere de un alto consumo de frutas frescas y vegetales. Necesita del consumo de carnes rojas, aunque magras y en su justa medida, y de pescados y mariscos, evitando la carne de cerdo y los embutidos. La leche, los derivados lácteos y los huevos frescos deben ser consumidos en su menor medida posible, así como el trigo y los derivados o procesados de harina de trigo, el maíz, y los cereales.
Nota: Recuerda que esto debe ser considerado como una tendencia de acuerdo a tu grupo sanguíneo. Por cualquier duda y para conocer mayores detalles, consulta con un especialista en nutrición o tu médico de cabecera.