Cómo ahorrar en algunas tareas de la rutina diaria

Vestimenta, gastos de traslado y el almuerzo en el trabajo son tres tareas diarias en las que podemos reducir gastos. Veamos algunas ideas para ahorrar en estas actividades.

Cómo ahorrar en algunas tareas de la rutina diaria

Hay actividades cotidianas relativas al trabajo que lentamente van provocando una fuga en nuestros ahorros.

3 ideas para ahorrar en la rutina diaria

El trabajo permite nuestros ingresos, que luego nos brindan la posibilidad de ahorrar. Sin embargo, hay actividades cotidianas relativas al trabajo que lentamente van provocando una fuga en nuestros ahorros. Son los enemigos silenciosos, casi ocultos, de nuestros esfuerzos por mejorar la economía doméstica. Veamos cuáles son, y cómo podemos minimizarlos.

"El reemplazo por el transporte público es la mejor opción para ahorrar en traslado."

Reduce gastos de traslado

Nuestro traslado desde y hacia el trabajo es una fuente constante de gastos. Tanto el valor del combustible como el del mantenimiento del coche (seguro, patente y demás) son constantes costos que hacemos a modo de inversión. A ello le incluimos otros, como el de estacionamiento.

En lugar de ir en tu auto solo, procura compartirlo para reducir los gastos, al menos de combustible. Si pactan con otros tres colegas, que cada uno disponga de su coche durante una semana al mes.

Sin embargo, el reemplazo por el transporte público es la mejor opción. El costo del pasaje puede ser fácilmente minimizado adquiriendo abonos laborales o bonos de tickets adquiridos por anticipado. Finalmente, si la ubicación del trabajo lo permite, aprovecha medios alternativos de traslado, como la bicicleta. No sólo ahorrarás una pequeña fortuna, sino que también harás ejercicios y tendrás mejor salud, evitando el costo de inscripción o membrecía en gimnasios y clubes.

Ahorro diario en vestimenta

Quienes usan un uniforme en el trabajo suelen odiarlo. Pero, ¿has pensado en sus ventajas? El uniforme es generalmente provisto por la empresa, por lo que no debes adquirirlo a tus expensas. También te evita el tiempo diario que dedicas a ver “qué vas a usar”, así como la compra, el lavado y el mantenimiento de numerosas prendas. Esto te ahorra dinero y también tiempo.

Si no usas uniforme puedes evitar la compra masiva de diferentes prendas de vestir, haciendo una selección a conciencia de tus atuendos. Elige un traje negro, uno gris, y uno claro. Con esto tendrás suficiente ropa para todo el año, combinándolos con diferentes camisas y corbatas, cintos o accesorios. Si prefieres, reemplaza el traje por un pantalón de vestir y una chaquetilla o un saco liviano. Si tienes las bases de vestimenta en colores neutros como los señalados, para el calzado tan sólo necesitarás dos o tres opciones: uno negro, uno café y uno claro serán suficientes.

"Las comidas en la oficina son un gran enemigo del presupuesto. Ahorra llevando tu propia comida."

Ahorrando en el almuerzo

Las comidas en la oficina son un gran enemigo del presupuesto. Las viandas compradas suelen ser económicas y convenientes, sin embargo, bien podrías evitar este gasto y reemplazarlo por un pequeño porcentaje del mismo si haces tus propias viandas.

Elige alimentos y menús que puedas congelar, y tan sólo deberás tomar un platillo o una porción por la noche, colocándola en la nevera para que se descongele mientras duermes. Acompaña con agua embotellada, recargando tu propia botella recargable, y con una fruta fresca. Un menú completo, por monedas al día.