¿Y si te dijésemos que ahorrar plástico es ahorrar dinero?

Pasan los años y seguimos sin poder comprender por qué endiablado mecanismo nuestros salarios rinden menos cada año. Se podría hablar de la tendencia alcista de la inflación y de la desvalorización de los salarios, y no estaríamos para nada equivocados. Sin embargo, poco podríamos hacer al respecto. Por el contrario, existe otra razón central que explica esta preocupante tendencia en nuestros gastos que, por suerte, podemos remediar si nos lo proponemos. Los llamados gastos invisibles y nuestros hábitos de consumo poco respetuosos con la cartera y con el medio ambiente tienen como consecuencia un crecimiento exponencial de nuestras pérdidas que somos incapaces de identificar en nuestra contabilidad diaria. Por eso, adoptar la estrategia de la hormiga y modificar día a día pequeños comportamientos, puede parecer a priori un gesto demasiado pequeño para dejarse notar en nuestras finanzas. No obstante, podemos asegurarte que unos pocos euros diarios, al final del año, son muchos euros. Y quién sabe, quizás se encuentre ahí la diferencia entre tu capacidad de hacer frente a un imprevisto o no.

Cambiar el mundo es cosa de todos, y no te lo dice solo tu conciencia. Que es fruto de un esfuerzo común lo saben hasta las empresas. Desde hace unos años, grandes y pequeñas compañías de todo el mundo tratan de alinearse con las demandas de un perfil de consumidor cada vez más crítico con lo que entra en su plato y sale de su bolsillo. A través de la llamada la llamada Responsabilidad Social Corporativa (RSC), el mundo empresarial recuerda a sus clientes la importancia de la responsabilidad en el consumo y en el gasto. A este tipo de iniciativas se suman ya desde hace años grandes medios de comunicación, bancas, industrias de distintos sectores y hasta entidades que se dedican a la concesión de Créditos Rápidos. el caso de Viaconto, una empresa dedicada a la concesión de préstamos online que, a su vez, promueve entre sus clientes campañas de concienciación sobre temas tan preocupantes como el consumo de plástico. A este respecto, una de sus acciones más reconocidas es la elaboración de un decálogo con consejos para ahorrar en plástico.

Partiendo del sencillo pero responsable gesto de cambiar las bolsas de plástico por bolsas reutilizables de tela, al decálogo de Viaconto no le falta detalle. ¿Y por qué una empresa de créditos rápidos como Viaconto se empeña en concienciarnos sobre el consumo de plástico? La razón es muy sencilla. En la economía global actual, las redes sociales y la imagen corporativa tienen la última palabra. Las denuncias, por parte de los internautas, de comportamientos erróneos o poco respetuosos, son susceptibles de generar una propaganda tan nociva que ni siquiera el más sólido negocio podría aguantarla. Las empresas son bien conscientes de que, ante consumidores cada vez más críticos, han de ser cada vez más responsables. Eso sí, es importante no olvidar jamás que pedir responsabilidad a las empresas no tiene ningún sentido si dicha responsabilidad no empieza por uno mismo. Además, dado que lo que está en juego no solo es el medio ambiente sino también tus finanzas personales, parece que ya no quedan razones para que te sumes al cambio.