Cómo hacer una agenda con forrado metalizado
Si quieres personalizar tu agenda, una opción es darle un acabado metalizado. Una técnica original y atractiva que puedes hacer fácilmente.
El comienzo del año laboral o del ciclo lectivo escolar, es un excelente momento para dar inicio a nuestra nueva agenda de anotaciones, planificación y testimonio de los momentos destacados. Y claro, un elemento tan personal, no puede sino lucir de la manera que más se adecue a nuestra identidad, reflejando nuestro gusto, nuestra imagen y quizás hasta nuestra personalidad.
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En el mercado puedes hallar agendas previamente impresas o presentadas de miles de formas y estilos. Si quieres darle tú mismo un toque personal a la agenda, también puedes poner en práctica todas las técnicas que conozcas, como la que veremos a continuación: haremos una agenda personal con estilo metálico.
Comenzamos por elegir la mejor agenda según nuestras necesidades. Luego, preparamos los materiales para hacer la presentación metálica.
Hay ciertas técnicas que podemos aplicar. La primera es forrar la agenda con papel de estaño. Este papel es una lámina metálica muy delgada (de estaño, aunque también puedes conseguirla en cobre o en imitaciones de plata y oro). Puedes encontrarla con autoadhesivo, o sin él.
Para colocarla, puedes primero modelar la presentación, colocando la lámina con la parte más brillante hacia abajo, y por sobre una plancha de goma Eva o Microporoso. Con un elemento punzante, aunque redondeado, darás las formas que prefieras. Puedes incluso colocar remaches, pegar tornillos o arandelas, o darle el acabado que desees. Si has realizado muchos relieves, para preservarlos debes rellenar con silicona caliente o con cera (parafina o cera de estaño). Luego, simplemente colocas adhesivo de doble contacto en la lámina (por el dorso) y en la agenda, y forras sencillamente, como lo harías con cualquier otro libro escolar.
También puedes realizar el forrado de la agenda con papel sanitario. Para ello, prepara una mezcla de agua y cola escolar en partes iguales, y corta (a mano) trozos de papel higiénico. Si la agenda tuviera tapas delgadas, puedes endurecerla antes con la técnica de cartapesta (colocando dos capas de papeles de periódico adheridos con cola). Luego, pinta la superficie con la solución de cola y agua, con cuidado de no mojar las hojas internas (puedes protegerlas con plástico).
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Coloca unas dos capas de papel sanitario, colocándolo sobre la superficie humedecida y presionándolo suavemente con una esponja embebida en esta solución. El papel se tornará rugoso. Luego de dejar secar a la perfección, pinta con acrílico de color metalizado de tu elección. Puedes hacer una pátina con cera de zapatos negra, o con grafito y cera incolora, para un acabado más llamativo. Si quisieras hacer imitación de peltre o de alpaca, prueba hacer algunas manchas de color turquesa. Para un toque oxidado, prueba hacer toques con un tono bermellón.
Luego, realiza las marcas distintivas. Adhiere arandelas, trozos de cadena delgada, hasta cabezales de tornillos (o cabezales modelados con porcelana fría, y pintados) para dar realismo a la agenda. Deja secar a la perfección, y protege con cera incolora o con barniz en aerosol.
