4 Recetas con Patatas

Latkes caseros

Tradicionales de la gastronomía judía, los latkes (o “latkas”) son un acompañamiento que puede convertirse en el plato principal de cualquier comida. Para preparar unos 24 latkes caseros (suficientes para 4 a 6 comensales) necesitas:

- 1,5 Kg (unas 3 libras) de patatas
- 1 cebolla grande (mejor si es amarilla)
- 2 huevos
- 1/4 de taza de pan molido o rallado
- 3 a 4 cucharaditas de sal (mejor si es kosher)
- 2 cucharaditas de polvo de hornear
- 1/4 de cucharadita de pimienta negra recién molida
- 2 cucharadas de schmaltz (para la versión tradicional. Sino puedes usar grasa de pollo o de ganso, mantequilla o aceite para freír)
- 3 cucharadas de aceite vegetal

Precalienta el horno a 160°C (325°F). Lava y pela las patatas y las cebollas, y procésalas (o rállalas, si no tienes procesadora). Escurre todo colocándolas sobre un paño limpio para quitar tanto líquido como puedas, y vuélcalas sobre otro paño limpio (trata de que estén tan secas como se pueda).

"Estas recetas con patatas son muy fáciles y rápidas de preparar, ideales para tener una cena lista en minutos."

En un bol, bate los huevos con el pan rallado, la sal, la pimienta y el polvo de hornear, y agrega después la mezcla de patatas y cebollas. Revuelve para integrar todo, logrando una textura algo pegajosa y no fluida (agrega un poco más de pan rallado, si lo notas necesario.

En una sartén adecuada, calienta la grasa y el aceite. Vuelca porciones de la preparación para hacer una suerte de buñuelos, aplanándolos con el dorso de una cuchara ni bien los pongas al calor. Fríe por unos 2 a 3 minutos de cada lado, y escúrrelos sobre una rejilla de alambre o papel absorbente, después en una placa de horno, para terminar la cocción allí y mantenerlos calientes y crocantes.

Wafles con patatas

Esta segunda receta con patatas es genial para el brunch, o para una cena sabrosa, aprovechando los sobrantes de puré, o haciéndolo con papas cocidas en el momento. Para hacer 4 gofres de patata grandes necesitas:

- 1/2 de taza de suero de leche (o leche, si prefieres)
- 4 huevos
- 4 a 5 tazas de puré de patatas
- 3 cucharadas de cebolleta picada
- 1 taza de queso rallado (el cheddar queda delicioso, pero puedes usar el que quieras)
- 1 taza de harina (cualquiera que no contenga levadura)
- 1 cucharadita de polvo de hornear
- 1/2 cucharadita de bicarbonato de sodio
- 2 cucharadas de aceite (el que prefieras)

Engrasa y calienta la plancha para wafles, o una sartén de fondo grueso. En un bol, bate el aceite, el suero de leche y los huevos, hasta integrar. Incorpora el puré de patatas, la cebolleta y el queso rallado. Añade después la harina mezclada con el bicarbonato de sodio y el polvo de hornear, tamizadas, agregándolas de a poco para evitar que se formen grumos. Si el puré fuese muy húmedo, quizás quieras agregar un huevo más para que la preparación tenga buena consistencia.

Vuelca las porciones adecuadas en tu waflera, o calcula medio cucharón grande por cada gofre, si lo vas a hacer en una sartén o plancha. Cocina hasta dorar por ambos lados, y sirve calientes o tibios con crema ácida, salsa barbacoa casera o el aderezo que prefieras.

Recetas con patatas rellenas

Las patatas rellenas no tienen por qué ser aburridas, ni mucho menos convencionales. Prueba con estas dos últimas alternativas sabrosas, originales, y que encantarán a toda la familia: patatas rellenas con espinacas, y pastel de carne invertido.

Patatas rellenas con espinacas

Cocina al horno una patata grande (limpia y con piel) por cada comensal. Deja entibiar hasta poder tomarla con la mano y, usando un cuchillo de buen filo, retira aproximadamente un cuarto de su altura, a lo largo, para crear una suerte de “tapa”. Con una cuchara pequeña, quita buena parte de la carne de la patata, logrando así una hendidura donde colocar el relleno.

En un tazón, mezcla 1/4 de taza de leche, 1/4 de taza de crema (nata) fresca, 1 cucharadita de crema agria (puedes usar queso blanco), 6 tazas de espinacas cocidas, bien escurridas y picadas, 1/4 taza de nueces picadas, 1/4 taza de queso parmesano (u otro), sal marina y pimienta al gusto, logrando una crema algo espesa.

Rellena las patatas y vuélvelas al horno hasta que se dore el relleno, y sirve calientes, espolvoreando por encima con cebolleta picada, o la hierba que prefieras.

Pastel de carne invertido

Esta receta de modo tradicional se hace cocinando una masa para tartas, que se rellena con carbonada (carne picada, cocida y condimentada) y puré de patatas por encima. Para esta alternativa, cocina una patata grande en el horno (lavada y con piel), deja entibiar, y crea un hueco dentro como en la receta anterior.