2 Recetas con Puré de Patatas

No es necesario tener sobras para hacer estos bocaditos. Puedes preparar puré cocinando las patatas, o hacer el que viene en sobre con un poco menos del líquido recomendado, para obtener una preparación algo más seca y consistente. Luego, toma nota de estas opciones prácticas.

Bocaditos con puré de patata

Una noche de películas con amigos, un buen partido por la TV o un encuentro a media mañana con la familia son escenarios ideales para hacer unos bocaditos con puré de patatas.

Para prepararlos, pon en la procesadora de alimentos aproximadamente 1 Kg. de patatas peladas, blanqueadas por algunos minutos en agua hirviendo, y cortadas en cubos. Procesa para reducirlas a una especie de puré. Agrega sal y pimienta negra al gusto (aproximadamente 2 cucharaditas) y una taza de agua fría o tibia (saltea este paso si ya tenias las sobras).

"Para estas recetas puedes preparar puré cocinando las patatas, o hacer el que viene en sobre con un poco menos del líquido recomendado, para obtener una preparación algo más seca y consistente."

Una vez obtenido el puré, procesa bien y después filtra para quitar tanto líquido como puedas, presionando con una espátula o el dorso de una cuchara sobre un tamiz fino.

Agrega cantidad suficiente de harina (la que quieras, sin leudante) para formar una pasta que no sea pegajosa. Agrega otros sabores en este punto, si quieres, como cubos de tocino cocido, queso rallado, hierbas o lo que elijas. Acomoda la preparación en un molde para hornear cubierto con papel film de cocina, haciendo una capa compacta de 2 pulgadas de espesor (5 cm. aprox.). Presiona muy bien, deben quedar firmes. Lleva a la nevera por una a tres horas. Precalienta el horno temperatura moderada.

Retira el bloque de patatas de la nevera, y corta en cubos o bocaditos de la forma que quieras. Lo que no utilices puedes volver a compactarlo y repetir el procedimiento.

Acomoda los bocaditos en una placa para horno rociada con aceite en aerosol. Cocina hasta que veas dorada la base; voltea los bocaditos y termina la cocción hasta dorar por todos sus lados. Si prefieres, puedes freír los cubos y escurrir bien antes de servir calientes, tibios o fríos, y acompañados con salsa barbacoa o la que quieras.

Wafles de patata

Usando patatas sobrantes de la ensalada o el puré que quedó de la cena de anoche puedes hacer unos geniales wafles o gofres de patata. Para ello, pon en la procesadora o licuadora 2 cucharadas de aceite de oliva (u otro), ¼ de taza de leche o suero de leche, y 2 huevos. Activa hasta que se haga una crema espumosa, e incorpora entonces el puré, aproximadamente 2 a 3 tazas. Agrega hierbas al gusto, sal y pimienta, dos a tres cucharadas de queso rallado, ½ taza de harina, ½ cucharadita de bicarbonato de sodio, y 1/2 cucharadita de polvo de hornear. Ajusta la cantidad de harina de ser necesario, para lograr una pasta de consistencia adecuada.

Mientras sigues licuando para integrar, calienta la waflera o una plancha lisa, engrasada con aerosol antiadherente. Cocina los discos del tamaño elegido y, cuando veas dorada la base, voltéalos para terminar la cocción. Sirve calientes con mantequilla fundida o crema agria, a tu gusto.