Cómo hacer rosas de papel

Aparta una flor para hacer luego el centro, y trabaja sólo con tres. Pliega las flores para marcar la división entre los pétalos y, mientras están aún plegadas, corta el centro de unión, sólo un poco.

Ahora, abre las tres flores y divídelas de esta forma: en una corta la división entre dos pétalos, en la segunda retira dos pétalos enteros, y en la tercera quita sólo un pétalo. Luego, adhiere uno sobre otro los pétalos más externos de cada flor, para darles forma cerrada. El resultado será una flor cerrada de 5 pétalos, otra de cuatro y otra de tres, tal como vemos en la imagen adjunta a esta nota.

"Esta es una idea práctica para hacer las flores más bellas con papeles gruesos, incluso con las hojas de un viejo libro."

Con la punta de un pincel, encorva los pétalos hacia fuera en las puntas. Adhiere las flores creadas una sobre otra, en orden descendente (la más grande abajo).
Toma la flor que guardaste y divídela en dos grupos de dos pétalos y dos de un pétalo. Toma los de dos pétalos, encorva hacia fuera sus extremos superiores, y enróllalos como un cono de helado. Coloca uno dentro del otro y adhiere al centro de la rosa. Finalmente, dobla los extremos de los dos pétalos que han quedado, y enróllalos sobre sí mismos, para finalizar el centro de tu rosa de papeles gruesos.

Cómo hacer rosas de papel en espiral

Una idea más simple y rápida, ideal para decorar presentes o para crear un centro de mesa genial. Utilizaremos papeles algo gruesos, como hojas de revistas o cartulina, o papeles metalizados del color y estilo que prefieras.

Corta un cuadrado de la cartulina de unos 30x30cm, aproximadamente. Ahora, utilizando tijeras que corten con ondas o con formas, recorta un círculo del tamaño máximo que permita el cuadrado, con prolijidad si se puede (dibuja el círculo con lápiz antes de cortar). 

Con las mismas tijeras de ondas, comienza a recortar un espiral dentro del círculo, haciendo tiras de uno y medio a dos centímetros de ancho, y dejando al centro un espacio del tamaño aproximado de nuestro dedo pulgar.

Toma el extremo exterior de la rosa y dóblalo hacia abajo, perpendicular al resto de la tira. Luego, pliégalo al centro. Vuelve a tomar la zona del doblez y comienza a enrollar la tira sobre sí misma, haciendo algo de presión en su base y dejando algo suelto arriba.