Qué hacer si el gato se queda afónico
Cuando notamos que nuestra mascota abre su boca pero no emite sonidos nos preocupamos, y mucho. Pero no te aflijas, que la afonía en los gatos es casi tan habitual como la que se presenta en humanos.
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¿Por qué se quedan afónicos los gatos?
La laringe de los gatos funciona de manera bastante similar a la nuestra, y también es propensa a sufrir lesiones producto de tomar frío, gritar demasiado, por enfermedades como la laringitis u otras infecciones, o simplemente irritación por alergias, polvillo en el aire, estornudos fuertes... casi como nos sucede a nosotros.
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También el estrés y las situaciones emocionales (como mudanzas, peleas con otros animales, castraciones y esterilizaciones, la llegada de otra mascota al hogar, incluyendo un bebé, etc.) pueden provocar esta irritación y causar la afonía en los gatos.
Señales de que el gato está afónico
Puede ser que el gato se quede sin voz alguna, y abra la boca pero no emita ni un sonido. También puede presentarse una afonía ligera, y notarás que su maullido se torna más seco, entrecortado, algo más grave y hasta ronco. Otra posibilidad es que emita grititos cortos, pues sufre de molestias en su caja de voz.
Qué hacer si el gato se queda afónico
Ya que son tan variadas las causas probables, desde situaciones leves hasta serias enfermedades, cuando el gato pierda la voz analiza su comportamiento. Si está como de costumbre, jugando y comiendo con normalidad, no tienes nada por qué preocuparte; el animal recuperará la voz en uno o dos días, aproximadamente. Pero si lo notas decaído, inapetente o con conductas extrañas, consulta con el veterinario para descartar enfermedades respiratorias u otras.
También observa la frecuencia y duración de la afonía. Si se trata de afecciones demasiado frecuentes (a veces hasta semanales) o de una duración de tres a más días, consulta con el veterinario. Puede tratarse de una alergia estacional o aérea, fácil de solucionar, o bien de un cuadro de enfermedad algo más complicado, aunque no sea amenazante.
"Ya que son tan variadas las causas probables, cuando el gato pierda la voz analiza su comportamiento."
En ningún caso debes medicar a tu gato. Recuerda que, aunque similares, nuestros cuerpos son diferentes en su funcionamiento. Puedes darle una aspirina para bebés si sabes que tiene fiebre o malestar luego de una vacuna, pero nunca suministrarle medicamentos, antibióticos, antiinflamatorios ni antihistamínicos al animal, sin la previa consulta y recomendación del profesional veterinario. Al hacerlo, podrías afectar su salud y causar problemas mucho mayores.
