Cómo Enseñar las Letras

Aquí te contamos consejos simples que harán de esta actividad un juego divertido, que además de enseñarles las letras también creen en sus mentes la práctica del estudio y del aprendizaje.

Dividiendo las tareas

Lo primero es explicar a los niños qué cosa es una letra y qué es un número, utilizando términos simples y de un modo práctico. El ejemplo de las letras siendo los ingredientes de una palabra funciona de muy buen modo, pues los pequeños comprenden que los ingredientes son “parte de algo”.

Muéstrale palabras escritas, y pídele que señale las letras una a una, incluso sin conocerlas. Sólo es para que reconozca cada letra como un ente individual (usando letra imprenta) y, para hacerlo más divertido, pídele que te diga a qué forma o figura le recuerda.

"Muéstrale al niño palabras escritas y pídele que señale las letras una a una, incluso sin conocerlas. Sólo es para que reconozca cada letra como un ente individual."

Por ejemplo, si señala la letra G tú dile “esa es la letra ‘G’, ¿a qué te recuerda?” y descubran juntos si tiene la forma de un caracol, o de una espiral. Si señala, por ejemplo, la letra “A”, dile “esa es la ‘A’, y creo que tiene forma de montaña. ¿Tú a qué le ves forma a la letra ‘A’?”. Pronto habrá aprendido el nombre de cada letra, y podrá recordarla mejor en sus formas.

Método para enseñar las letras

Una vez que el niño o la niña pueda identificar las letras como entidades individuales y ya se haya acostumbrado a sus formas, es  tiempo de pasar al siguiente nivel y enseñarle sus nombres y sonidos. Este es un concepto importante para los niños: debes explicarle que las letras tienen una forma, un nombre, y un sonido (y que las vocales tienen un nombre que es igual a su sonido, pero deja que el niño lo descubra por su cuenta):

• La letra G tiene la forma de un caracol, se llama “ge”, y suena como “ggg”.
• La letra A tiene forma de montaña con un palito al centro, se llama “a”, y suena como “aaa”.

Jueguen a hallar la forma de cada letra, mientras tú le recuerdas el nombre y el sonido de cada una de ellas, hasta que el pequeño las identifique por su cuenta. Una vez que lo haga, dile algunas palabras que comiencen con ese sonido pronunciándolo bien claro y sostenido, por ejemplo:

• La letra M tiene la forma de dos montañas muy juntas, se llama “eme”, y suena como “mmm”. Por ejemplo, es la letra que usas para “mmmamá” y para “mmmono”.
• La letra P tiene la forma de un palito y la mitad de un círculo arriba, se llama “pé”, y suena como “ppp”. Es la letra de “pppapá” y de “pppelota”.