Cómo encontrar tiempo para la lectura
Cómo volver a disfrutar de la lectura, con la llegada de los hijos y de las responsabilidades.
Buscar el tiempo para la lectura
La lectura es un placer que, con la llegada de las responsabilidades de la vida, se nos va escapando y olvidando. Leer un buen libro es uno de los mayores deleites de la vida, una buena historia impresa nos puede hacer viajar hacia horizontes y tiempos muy remotos, sin abandonar nuestro sillón, y tiene la capacidad de hacernos olvidar nuestros problemas y preocupaciones por un buen rato.
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Pero a veces olvidamos como dejarnos llevar por ellos, y hasta sentimos pocos deseos de tomar un libro entre nuestras manos cuando comenzamos a pensar "en el momento en que lo abra, va a sonar el teléfono, van a llegar los chicos de la escuela, voy a tener que empezar con la comida".
"Leer un buen libro es uno de los mayores deleites de la vida, una buena historia impresa nos puede hacer viajar hacia horizontes y tiempos muy remotos."
Bien, hay una forma de volver a enamorarnos de la lectura, y es darle un lugar protagónico en algún momento clave, de acuerdo a las características de nuestras propias vidas. Las mamás y papás de hijos pequeños no disponen de muchos momentos de paz y tranquilidad absoluta como para entregarse y abandonarse a las páginas de una buena historia.
Los papás de adolescentes no suelen hallar el silencio requerido, los trabajadores independientes casi nunca logran separar sus mentes de sus trabajos, y así, siempre tenemos una excusa para no leer. Pero debemos recordar que disponer de un tiempo para nosotros y para nuestros gustos es muy importante para nuestro bienestar, y la lectura de un buen libro es algo que nos puede ayudar a relajarnos, a calmarnos, a llorar o reír según sea el caso, y a separarnos de la realidad por algún rato.
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"Hay una forma de volver a enamorarnos de la lectura, y es darle un lugar protagónico en algún momento clave, de acuerdo a las características de nuestras propias vidas."
Consejos para tener tiempo para leer
- Intentá analizar tus horarios, para ver cuando se puede disponer de un rato de tranquila lectura. Quizás sea por la noche, cuando te vas a acostar. Quizás sea de mañana, antes de que los demás se despierten. Quizás sea en los fines de semana, cuando las parejas y los hijos están haciendo otras actividades. Cada quien tiene su momento ideal para dejarse seducir por las páginas de un libro atrapante.
- Cuando abras un libro, no lo hagas pensando en que vas a leer hasta que suene el teléfono, hasta que lleguen los chicos. Leé hasta que dejes de leer, y disfrutá cada momento de ello. El beneficio de las historias impresas es que nos pueden envolver en una nube de ausencia, de entrega, de romanticismo, de suspenso, de lo que sea: pero nos pueden atrapar, si es que nos dejamos convencer y seducir por ellos. Leer es un placer olvidado en nuestra realidad, y es buen momento para recuperar ese placer de la vida.
