Una de las claves a la hora de mejorar el entrenamiento y tonificar la masa corporal, es conocer bien los músculos que hay en el cuerpo humano. Así no solo se entiende mejor qué ejercicios debemos practicar para hacer crecer según qué músculos, sino que se pueden llegar a evitar muchas lesiones. En el siguiente artículo vamos a explicar los tipos de músculos que hay en el cuerpo, para poder sacar un mayor rendimiento a nuestro entrenamiento.
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Los principales tipos de músculos que hay en el cuerpo humano
Algo que se debe entender como punto de partida, es que los músculos del cuerpo humano son diferentes entre sí, y al no tener las mismas características, parece evidente que las funciones y los ejercicios de entrenamiento tengan que ser bien diferentes. Los principales músculos del cuerpo humano se pueden categorizar en tres grupos: los músculos esqueléticos, músculos cardíacos, y finalmente, los músculos lisos.
Éstos están bien diferenciados y cumplen funciones diversas para la salud y el bienestar del organismo. La estructura de los huesos se apoya y moviliza gracias a la musculatura esquelética, mientras que los músculos lisos son esenciales en ciertas funciones corporales, como los vasos sanguíneos o las vías respiratorias. Finalmente los músculos cardíacos son aquellos que crean las contracciones que realiza el corazón para un correcto funcionamiento. Si bien es cierto que por ejemplo los músculos lisos no pueden tener un entrenamiento activo, sí que pueden fortalecerse o aumentar su capacidad indirectamente. Si realizamos ejercicios con el peso de nuestro cuerpo, sin necesidad de máquinas de entrenamiento, podemos mejorar el sistema cardiovascular para aumentar el suministro de sangre, proporcionando reservas de nutrientes para ese tejido muscular liso.
Son varios los artículos de entrenamiento que hablan sobre cómo mejorar el rendimiento de nuestros ejercicios con prácticas que mueven y desarrollan los músculos esqueléticos. Éstos son el tipo de músculo más importante en relación al entrenamiento, ya que comprende la mayoría del tejido muscular (casi 400 músculos diferentes). Los esqueléticos pueden estimularse y ejercitarse a la perfección, llegando a crecer debido a la tensión y el cansancio en las sesiones de entrenamiento
Por otra parte, los músculos cardíacos, a través de los ejercicios tienden a contraerse más rápido para cubrir esa demanda de sangre que pide el cuerpo. Con ese esfuerzo el sistema cardíaco se hace menos vulnerable, y por tanto, más fuerte.
Tipos de entrenamiento para ganar fuerza y musculación esquelética
Antes de comenzar a hablar de los tipos de entrenamiento que pueden mejorar la musculación esquelética, debemos realizarnos la siguiente pregunta: ¿es necesario un entrenamiento que implique a todos los músculos? No, sería un error pretender abarcar todos los músculos, ya que no se va a tener el suficiente tiempo para hacerlo y porque el cuerpo trabaja en armonía utilizando varios músculos a la vez. En realidad, es mucho más aconsejable trabajar con grupos de músculos como el pectoral, la zona dorsal y los cuádriceps. Ejercitando estos tres grandes grupos se puede, en un principio, hacer crecer nuestra masa muscular.
Éstos son los entrenamientos más recomendables para entrenar la musculación esquelética:
- Entrenamiento HIIT: su nombre proviene de las siglas en inglés de intervalos de entrenamiento de alta intensidad (High Intensity Interval Training). Hasta ahora era una forma de entrenamiento algo desconocida, pero debido a sus beneficios, poco a poco se ha convertido en una tendencia en el mundo de los entrenamientos. Se tratan de ejercicios explosivos de corta duración.
- Entrenamiento CORE: este tipo de entrenamiento trabaja la parte central del cuerpo, implicando lumbares, glúteos o el suelo pélvico. Este tipo de entrenamiento previene las lesiones, pero sobre todo ayuda al equilibrio, generando cierta estabilidad derivada del trabajo de sus 29 músculos.
- Entrenamiento con máquinas como el remo: existen una gran cantidad de máquinas para hacer crecer la musculatura, pero lo cierto es que el remo es uno de estos artilugios idóneos por lo completo que es. Con esta máquina se gana músculo en las piernas y brazos, a la vez que se trabaja la resistencia y aumenta la fuerza de nuestra espalda.
