Cómo Curar el Mal Humor

Quitar el mal humor con tus pensamientos

Siempre parece más fácil “decirlo que hacerlo”, pero si quieres recuperar tu sonrisa casi como por arte de magia, necesitas cambiar tu estado de ánimos (sí: resulta obvio decirlo), haciendo una simple modificación en tus pensamientos.

¿Hay algo que te haga reír en cada ocasión en que lo ves o piensas en ello? ¿Quizás una película, un video que esté circulando por la web, o una canción que te haga gracia? ¿Hay una fotografía de un gran momento de tu vida que te haga recordarlo a carcajadas? ¡Ponte a mirarlos!. Sólo ver estas imágenes o escuchar esos sonidos hará que tu enfoque emocional se ponga sobre las buenas emociones asociadas. Podrás curar tu mal humor tan sólo viendo un álbum de viejas fotos, o escuchando esa canción tan chistosa que es capaz de arrancarte de tu enfado y hacer que lo olvides por completo.

"Podrás quitarte el mal humor tan sólo viendo un álbum de viejas fotos, o escuchando esa canción tan chistosa que es capaz de arrancarte de tu enfado."

¿Buscas otra manera de cambiar tu estado de ánimo? Toma un breve descanso. Contrariamente a “obligarte” a pensar en cosas positivas, o de dejarte sumir aún más por los malos pensamientos, sólo deja de pensar y cierra los ojos. Puedes tumbarte en el sofá, en tu cama o donde quieras, y procura dormir al menos unos 15 a 20 minutos. Verás que, al despertar, tu negatividad habrá desaparecido, y podrás enfrentar la vida de una manera mucho más productiva.

Quitar el mal humor con acciones

Hay quienes mejoran sus ánimos con duras sesiones en el gimnasio, y seguramente quienes mitigan los malos pensamientos yendo de compras libremente Pero no siempre tenemos el tiempo, las energías o el presupuesto para estas acciones. Aquí hay otras 3 buenas propuestas que tenemos para sugerirte.

Una de ellas es salir a pasear. Puedes dar una vuelta por tu vecindario, ir a la tienda de a pie o en bicicleta, o tal vez sólo recorrer tu jardín y apreciar las nuevas flores que han brotado. Para cambiar tu humor necesitas cambiar tu escenario: sal a ver otras casas, otros colores, camina, deja que la sangre circule, no pienses en nada más que dar un paso tras otro, en notar el sol en tu piel y en escuchar los sonidos de la ciudad o del vecindario. Verás que un breve paseo es capaz de cambiar tu estado de inmediato. ¡Y es gratis!

¿Buscas algo más drástico? Para curarte del mal humor necesitas sonreír. Fuerza los músculos de tu rostro para hacer una sonrisa amplia, que enseñe los dientes. Aunque no sientas las ganas de hacerlo, este acto forzado provoca en la mente una repuesta automática de seguridad y satisfacción. Con sólo algunos segundos de sonrisa, tu mente perderá la concentración en lo negativo y se liberará. Pruébalo, y verás que es tan fácil que te preguntarás por qué no lo habías hecho antes.