Cómo Administrar una Tienda de Juguetes

Entonces, la administración de una tienda de juguetes se debe hacer pensando en estos tres pilares. Mientras que son los padres los que pagan por un producto en particular, son los hijos los que disfrutan de ellos, por ende, los que deciden. Esto quiere decir que los niños son el consumidor principal y todo debe estar pensado para que ellos puedan acceder más fácil y rápido a sus sueños.

tips para la organización de una tienda de juguetes

Para una mejor organización de una tienda de juguetes, ten en cuenta estos tips:

Al administrar una tienda de juguetes contrata de forma inteligente a tus empleados. No es suficiente con que estén bien informados de las últimas estrategias de venta, también deben conocer al público al que se dedican, es decir, a los niños. Y les debe gustar estar cerca de pequeños todo el día, muchos de los cuáles llorarán o se enojarán si no tienen lo que quieren. Las entrevistas antes de contratar son muy importantes, más allá de tener en cuenta las aptitudes o la disponibilidad horaria, consulta por su actitud frente a los desafíos infantiles.

"Para aumentar las ventas en tu tienda de juguetes, no dudes en mostrar a los clientes muchos productos, así será más fácil que compren alguno."

Muestra más opciones a los clientes. Esto quiere decir, ofrecer un artículo que se asemeje a lo que busca, pero de otra marca, por ejemplo. Para aumentar las ventas en tu tienda de juguetes, no dudes en mostrar a los clientes muchos productos, así será más fácil que compren alguno. Sobre todo, ten a la vista los que aparecen en los comerciales de la televisión, que son los que los niños reconocen más fácilmente. Mantener a la altura de los pequeños los juguetes que quieres vender es una excelente estrategia de negocio.

Siempre mantén la concentración. Tus empleados también deben estar enfocados en su trabajo. Una gestión efectiva para la organización de una tienda de juguetes es que, si bien los trabajadores pueden jugar con los niños, o “hacerse amigos”, también deben estar atentos a los padres, que son, definitivamente, los que sacarán la tarjeta de crédito o el dinero para pagar. Y a su vez, al haber tanta cantidad de artículos, evitarás robos o roturas (no dudes en instalar cámaras si lo crees necesario).

Recuerda que no siempre el cliente tiene la razón. En muchos casos, los consumidores se confían en esa regla y exigen cualquier cosa. No debes dejar que, a costa de tu fuerza de ventas, los clientes no estén 100% felices. Si un cliente está fuera de si, enfrenta la situación para que ambos salgan ganando en la medida de lo posible.

La administración de una tienda de juguetes también está relacionada a la limpieza y a la higiene. Recuerda que tiene que verse bien ordenada para los adultos, pero divertida y llamativa para los niños. Es posible lograr un equilibrio entre ambas miradas. Es decir, que no debe tener un aspecto “remilgado”, donde la gente no sienta ganas o le de miedo tocar algo. “Felizmente desorganizada” es la mejor fórmula.

3 claves para administrar una tienda de juguetes

Más allá de los consejos sobre cómo administrar una tienda de juguetes que se indicaron anteriormente, es bueno saber algunos tips más con respecto a cómo es un día “normal” en un negocio de estas características, teniendo en cuenta las tareas que debe realizar o cumplir un propietario.

1. Establece los horarios de apertura y cierre del negocio. Ten en cuenta que en algunas épocas especiales (día del niño, Navidades y Día de Reyes), deberás permanecer abierto durante más horas, además de contratar personal adicional. Pero, la buena noticia es que tus ganancias también serán mayores. El programa de horarios es importante para que se pueda organizar mejor cuándo trabaja cada empleado, si hay turnos o descansos rotativos, etc. El horario también puede cambiar según si es invierno o verano, o en los fines de semana que sea más extenso.

2. Trabaja con los clientes: El dueño de una tienda de juguetes suele estar en la caja registradora cobrando. Es una excelente excusa para hablar con los clientes y saber qué es lo que les gusta de la decoración, o aprovechar para informar de nuevas promociones o juguetes que acaban de llegar. Saber cuáles son sus necesidades es vital también para mejorar o añadir servicios.