Cómo Aceptar Quien Soy

Es normal que, en el trabajo o en ciertas situaciones sociales, tendamos a modificar un poco la manera en la que nos expresamos al mundo para encajar en la situación, o para tener mayor prosperidad (seguro que en la oficina no eres como en casa), pero a solas, en la intimidad, es cuando puedes ver en verdad quién eres, para apreciarte en tus complejidades, defectos y virtudes, y poder aceptarte ante todo.

Analizarnos a nosotros mismos es una tarea difícil. La más difícil, pues vivimos constantemente justificándonos. “Soy malhumorado porque mi economía está mal, y mi economía está mal por los impuestos del gobierno”. “Soy una persona muy privada y eso está bien, pues siendo abierto me expongo a que se abusen de mi confianza”. Como esas, hay muchas frases que explican lo que soy y lo que hago, pero ninguna de ellas permite aceptar quien soy en verdad.

"Aceptarte como eres incluye tener la capacidad de valorarte. Debes convertirte en la persona que a ti mismo te gusta."

Eso que me gusta de mi

"Hay cosas que me gustan de mí, y que busco en otras personas con las que quiero rodearme. Hay cosas que me obligo a ser, me doy a la tarea de ser solidario, bondadoso, cariñoso, pues es lo que me gusta en los demás y que ellos sean hacia mí". Esos son puntos muy fuertes, y te hacen saber que eres una persona que se esfuerza, que lucha a diario contra la capacidad de maldad, de intolerancia, de la negatividad. Encuentra tus puntos fuertes y recuérdatelos a diario, enorgullécete de ellos, pues te ayudarán a apreciar quien eres en profundidad.

Aceptarte como eres incluye tener la capacidad de valorarte. Suena simple, pero es bien complicado comprender que tenemos muchas virtudes, quizás ni siquiera esas que pensamos a simple vista. Debes convertirte en la persona que a ti mismo te gusta, que te hace sentir bien y te acompaña y cuida, igual que lo harías al buscar a una pareja o una nueva amistad.

Eso que no me gusta de mi

Analízate como si analizaras a otra persona. Mira quién eres, qué es lo que eres, y qué es lo que no te gusta de ti mismo. Si no estás cómodo en tu propia piel, si encuentras alguna actitud, un comportamiento o algo en ti que definitivamente no buscarías en un amigo o en una pareja, entonces debes darte a la tarea de cambiarlo, pues es imperativo conocerte y agradarte a ti mismo antes que a los demás.

¿Se trata de tu carácter, de tu humor y de la manera en la que ves al mundo? Pues haz lo posible por cambiarla hacia algo que te guste, que te de orgullo tener en tu canasta de características. Haz ejercicios que te ayuden a cambiar la manera en la que te ves, sal a pasear para despejar la mente de malos pensamientos, dedica cinco minutos de cada día para apreciar lo que tienes y lo bueno que te ha sucedido en ese día. Aceptar quien eres es, también, comprender que eres tú quien tiene la capacidad de alterarte, de cambiarte por una mejor versión de ti mismo sin falsedades ni obligaciones, sino por tu bienestar y amor propio.