Peligros potenciales de darle el móvil a tu bebé para jugar
Si, hay momentos en que entretener al bebé es difícil, pero si hay algo que no debes hacer es ofrecerte tu celular para que juegue. Veamos por qué.
Nunca debes dar a tu bebé el móvil para explorar
Razones para no darle el móvil para jugar al bebé
A partir de los 5 meses de edad, aproximadamente, los bebés comienzan a descubrir el mundo que los rodea. Todo lo quieren asir, chupar, arrojar y experimentar, y es habitual que lloren o demuestren inquietud si se aburren o si no tienen juguetes. Por ello, muchos padres les ofrecen lo primero que tienen a mano: utensilios de cocina, prendas de vestir, incluso el teléfono móvil. ¡Alto ahí!. Nunca debes dar a tu bebé el móvil para explorar, y aquí te contamos por qué.
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El móvil es un elemento sucio
El teléfono móvil suele tomarse con las manos, apoyarse en el rostro y el pelo, mantenerse en los bolsillos y en las carteras y compartido de mano en mano, incluso cuando vas por la calle o en el colectivo. No es difícil suponer la enorme cantidad de bacterias y suciedades que se acumulan en su estructura. Además, por cuestiones de formas, rendijas y teclas, es virtualmente imposible higienizarlo de una manera apropiada: aunque lo repases con toallas higiénicas, siempre queda residuos de estos desagradables depósitos.
"No es difícil suponer la enorme cantidad de bacterias y suciedades que se acumulan en el móvil."
Radiación mínima, pero presente
Mucho se ha estudiado el aporte de ondas radiactivas por los teléfonos móviles. Imagina que si se está analizando la potencialidad cancerígena y la formación de tumores cerebrales por el uso del celular, lo último que quieres dar a tu bebé es un elemento con semejantes sospechas.
También debes tener en cuenta que, detrás de las modernas pantallas táctiles y de alta resolución, hay muchos componentes químicos sumamente perjudiciales para el ser humano. Accidentalmente se puede fisurar esta pantalla, exponiendo al bebé a succionar y a entrar en contacto directo con estos elementos.
Pequeñas partes del móvil pueden afectar al bebé
Los móviles tienen innumerable cantidad de pequeñas piezas contenidas en sus carcasas. Pero no es difícil hacer que se desprendan, con un poco de palanca o un movimiento específico. Al chupar la zona de las teclas o las tapas de los sistemas de conexión, el bebé puede tragarse algún elemento, con riesgo de asfixia.También, al jugar con el móvil el pequeño puede quitar accidentalmente la tapa de cobertura de la batería, y no es necesario que te repitamos lo peligroso que es que un niño pequeño chupe este sucio elemento, cargado de ácidos.