Ideas para Conservar Recuerdos

Pero lo cierto es que esos objetos sólo son representaciones físicas de algo mucho más grande, que son nuestros recuerdos. Al conservarlos pensamos que nos ayudarán a recordar, pero lo cierto es que (salvo uno que usemos a modo de talismán, por ejemplo), puedes deshacerte de estos elementos sin función, y aún así conservar frescas las memorias y las emociones de los momentos vividos que representan. Y aquí te enseñamos cómo lograrlo.

¿Por qué conservamos objetos?

No se trata de un síndrome, de una enfermedad ni de un comportamiento compulsivo, al menos no en la mayoría de los casos. Lo cierto es que conservamos elementos porque les conferimos un valor emocional y sentimental: plasmamos en ese papelito viejo la emoción de nuestro gran momento. Pero si otra persona tomara ese mismo papel, verás que no es una pieza mágica ni está cargada de profundidad alguna: es sólo un papel, y es tu propio recuerdo el que le da su “importancia”.

"Para conservar los recuerdos primero tómalos uno a uno, obsérvalos, y analízalos. ¿Evocan en ti un grato recuerdo? . Si es así, sepáralo y sigue al siguiente objeto, de lo contrario bótalos sin pensarlo."

También solemos guardarlos porque nos lo ha entregado alguien significativo en nuestras vidas. Un ejemplo bien claro son los dibujos infantiles, que guardamos uno tras otro y pasan años sin que siquiera los apreciemos, tan sólo porque lo dibujó un hijo, un sobrino, un nieto, un alumno muy querido. Y tenemos pudor en deshacernos de estos, porque sentimos la culpa del desprecio, cuando en verdad no es nada semejante.

Ideas para conservar recuerdos

Primero debes conectarte a nivel personal con cada uno de estos pequeños elementos que tienes en álbumes, carpetas, cajas, cajones, o exhibidos en casa. Tómalos uno a uno, obsérvalos, y analízalos. ¿Evocan en ti un grato recuerdo? ¿Te hacen sentir feliz, emocional? Si es así, sepáralo y sigue al siguiente objeto. Pero de lo contrario, si no evoca ninguna emoción, si te provoca una sonrisa pero nada demasiado significativo o si –peor aún- ni siquiera recuerdas por qué lo conservas, bótalo sin pensártelo dos veces.

Ya analizados uno a uno, es hora de aplicar algunos de estos consejos para conservar recuerdos:

Carpeta de recortes: Si fueran elementos planos y muy significativos, reúnelos en una sola carpeta de recortes (scrapbook), acompañándolos con una frase explicativa si quisieras. Así tendrás los elementos sólo fundamentales, pero bien ordenados y en un mismo álbum.

Tómales una foto. Con tu móvil o con una cámara digital. Luego, descarga las fotos en el ordenador, y crea un álbum exhibiéndolas y acompañándolas de una frase explicativa. Conserva el álbum en tu ordenador o en una memoria o dispositivo de almacenamiento. ¿Quieres llevarlo al siguiente nivel?. Ponlas en la nube o en línea, como una carpeta en tu cuenta de Facebook que sólo tú puedas visualizar (o quien quieras).

Conviértelos en otro elemento. Adhiere tus recuerdos a una base, y crea con ellos un original marco para el espejo de tu vestidor. Recicla los papeles para hacer un papel reciclado con una emoción especial que sólo tú conozcas. Crea un sinfín de elementos con tus recuerdos más preciados, dejándolos a la vista o detrás de una capa de pintura, en lo que tú prefieras. Así podrás conservarlos, pero en un mismo elemento y no regados por toda la casa, y además complementando tu decoración y confort.