Cómo eliminar el catarro naturalmente

5 infusiones para eliminar el catarro

1. Ajo crudo: Un diente de ajo al día, mezclado con otros alimentos calma la tos, mata gérmenes y reduce la inflamación.

2. Limón y miel: Exprime un limón y añade una cucharada de miel. Luego, vierte la mezcla en un vaso de agua caliente y bebe. Esto debe realizarse una vez al día como mínimo.

3. Cebolla y miel: Para preparar este jarabe, pica dos cebollas y ponlas en un bol; agrega 10 cucharadas de miel de tomillo, romero o miel flores. Deja macerar 12 horas y luego bebe una cucharada cada dos horas. No se recomienda que lo consuman los diabéticos por su alto grado de azúcar.

"El catarro es una inflamación de la pared interna que recubre las vías aéreas: nariz, laringe, tráquea y bronquios."

4. Eucalipto: Las inhalaciones de eucalipto ayudan a descongestionar las vías respiratorias y aliviar el catarro. Para ello, hierve 2 litros de agua en una olla, y agrega cucharadas de hojas de eucalipto molidas. Luego, tápate la cabeza con una toalla, y respira profundamente por la nariz el vapor que sale de la olla durante unos 10 minutos (con cuidado de no quemarte la cara con el vapor). Repite dos veces al día.

5. Tilo: Para preparar una infusión de tilo contra el catarro tienes dos opciones. Compra el saquito directamente en cualquier supermercado, o acude a una herboristería y compra la hierba suelta. Si te decides por la última opción, vierte una cucharadita de flores y hojas de tilo en 250 cm3. de agua hirviendo. Esta infusión se recomienda tomarla por la mañana y a la noche antes de acostarse.

¿Por qué tienes catarro?

El catarro, la tos y la bronquitis son términos que suelen confundirse habitualmente, sin embargo hay diferencias. La tos se diferencia de la gripe en que ésta última afecta a otras partes del cuerpo, y de la bronquitis, porque aquí hay infección sólo en los bronquios.

La mucosa (o pared interna) puede inflamarse como consecuencia de alguna irritación producida generalmente por el frío, el humo o hablar demasiado. Esta patología se complica cuando se infectan las vías respiratorias con gérmenes externos. En ese momento, la mucosa inflamada produce dolor, tos y expectoración.