Cómo construir títeres con una calabaza

Pues bien, es posible recuperar todo ese sortilegio para nuestros hijos si construimos con ellos una serie de títeres. Esta actividad, además de mejorar la convivencia que tenemos con nuestros chicos a través del trabajo manual compartido, optimizara su creatividad e imaginación. (Y nos hará vivenciar, a su vez, cuan disfrutable es la experiencia de hacer arte).

"Para hacer un títere estupendo, en primera instancia, se consigue una calabaza seca, se la lija y se la raspa convenientemente."

Cabeza del títere

Calabaza. Para hacer un títere estupendo, en primera instancia, se consigue una calabaza seca, se la lija y se la raspa convenientemente. Con ella haremos la cabeza de nuestro personaje. Luego, con papel, harina y agua, mezclados y amasados hasta evitar todo tipo de grumos, se obtiene una pasta suave y dúctil, que nos servirá para aplicarla a la calabaza pulida y moldear así, el rostro del títere.

Tras haberla dejado secar, se pinta la cabeza, utilizando acuarela u pastel. Pueden añadirse detalles graciosos y vistosos, como fijarle piedras de colores como ojos, y hacerle el cabello con estambres. Pero también pueden trabajarse esos detalles imitándolos con pintura.

Cuerpo del tìtere

Tela. El cuerpo del títere debe estar hecho de tela, y tener las dimensiones suficientes para que amolde bien allí el brazo del titiritero, hasta la altura del codo. La mano y el brazo de quien manipule al muñeco, formarán el cuerpo; los dedos pulgar y mayor, le darán vida a los brazos y a las manitas del títere. También, el índice se insertará en la boca de la cabeza y hará, cuando se requiera, las veces de cuello, para que el personaje gire su cabeza de un lado a otro y se obtenga más realismo en su desempeño.