Reacciones extrañas del cuerpo

¿Por qué silban los oídos luego de mucho ruido?

A veces nuestros oídos nos juegan una mala pasada, y nos dejan oyendo sonidos como agudos o de timbrazos por algunos momentos. En especial luego de haber salido de festejos o de haber estado en sitios ruidosos, quedamos escuchando un molesto sonido que amenaza con quitarnos la tranquilidad.

Puede deberse a un tinnitus (acufeno), una pérdida temporal de parte de nuestra audición luego de semejante exposición a los sonidos, y la solución es sólo dejar pasar el tiempo en un sitio silencioso, permitiendo que el tímpano se calme y recupere por su cuenta.

"No se trata de síntomas ni de condiciones preocupantes, sino de reacciones naturales que suceden ante condiciones explícitas."

Si el sonido o la molestia persiste, si no has estado expuesto previamente a mucho ruido, sientes además náuseas o mareos, o si notas desvanecimiento en algún sector de tu rostro, consulta a un médico.

Sacudones previos al sueño

Cuando te preparas para dormir y estás entrando en el mágico mundo onírico y tu cuerpo da unos tremendos sacudones, no debes preocuparte. Esta condición, conocida como "inicio del sueño", se debe a que tus nervios están relajándose y enviando señales confusas al cerebro mientras el cuerpo se prepara para la relajación total. Sólo respira profundamente y deja que tu cuerpo haga su trabajo.

Si los sacudones son suficientes como para despertarte, procura tomar una ducha caliente o haz un poco de relajación antes de ir a dormir, para acelerar la preparación del descanso.

¿Qué son las manchas escurridizas en la vista?

Alguna vez has notado pequeñas manchas que aparecen frente a tus ojos y, al intentar enfocar la vista sobre ellas, se mueven muy escurridizas. Se trata de células de cambio de tu retina, que ya han cumplido su ciclo vital y abandonan el sitio, dejando el lugar para una célula nueva como ocurre en cualquier región de tu cuerpo. Evita frotar tus ojos y, simplemente, pestañea para eliminarlas velozmente.

Mandíbula que parece trabada

A veces nos sucede que la mandíbula, al abrir mucho la boca, hace una suerte de chillido cuando la cerramos de súbito, como si amenazara con trabarse. Esto se debe a que tenemos la mandíbula en una posición incómoda para su funcionamiento, como uno o dos milímetros movida hacia el costado, algo muy habitual cuando intentamos imitar el proceso de masticar, o si la movemos al bostezar. Para evitarlo, simplemente haz el movimiento más suavemente, y listo.