Productos de Limpieza que No se Deben Mezclar

Algo que solemos hacer…

A veces mezclamos líquidos de limpieza sin siquiera notarlo, pero mucho más a menudo lo hacemos para duplicar nuestros esfuerzos y reducir los tiempos en los que, en efecto, logremos eliminar esas molestas manchas.

Pero esas combinaciones no siempre son la solución más segura. Por un lado, porque cuando sus ingredientes se encuentran pueden sufrir reacciones y liberar gases que, a menudo, resultan tóxicos para los humanos y los animales, en distintas intensidades. Pero por otro lado, esas reacciones crean un nuevo producto que puede poner en peligro las superficies con las que entre en contacto, sea la mesada, el piso o lo que sea que estés limpiando.

"Hay combinaciones de artículos de limpieza peligrosos, ya que cuando sus ingredientes se encuentran pueden sufrir reacciones y liberar gases que, a menudo, resultan tóxicos."

Artículos de limpieza que no hay que mezclar

Ciertos productos no se deben combinar nunca y, sin embargo, son de los más usados en el hogar; a veces lo hacemos sólo al enjuagar el primero con el segundo. Estas son algunas mezclas que es mejor evitar:

Blanqueador y alcohol: Cuando se mezclan producen cloroformo y ácido muriático. Ambos son nocivos para la salud, afectando al sistema nervioso, los pulmones, riñones, el hígado, la piel y los ojos, tanto por contacto como por inhalación. Puede producir mareos, náuseas, vómitos, y pérdida de conciencia, poniéndote también en peligro de otras lesiones indirectas ante un desmayo o una caída (y haciéndote respirar aún más el producto si esto sucediera).

Blanqueador y amoniaco: Cuando se combinan producen gases tóxicos que afectan al sistema respiratorio. Por si fuera poco, la mezcla de amoniaco con el gas cloramina puede resultar en una peligrosa explosión.

Blanqueador y limpiadores específicos: Los limpiadores para superficies específicas (desengrasante, limpiavidrios, limpiador para el piso y demás) tienen una mezcla de compuestos que pueden reaccionar con el blanqueador, creando gas de cloro. Éste puede producir problemas respiratorios y oculares serios. Por seguridad, no mezcles blanqueador con ningún otro producto.

Blanqueador y vinagre: La combinación produce gases que pueden provocar quemaduras químicas en los ojos, la piel, los pulmones y el tracto respiratorio.

Vinagre y bicarbonato de sodio: Aunque esta mezcla puede ser genial para quitar suciedades y obstrucciones de las cañerías, la agregamos a esta lista sólo como prevención, para que recuerdes no realizarla dentro de un contenedor cerrado y frágil (que pudiera explotar por la presión), ni tampoco tome contacto con tu piel o alcance tus pulmones o tus ojos, tanto por salpicadura como también por gases.

Vinagre y peróxido de hidrógeno (agua oxigenada): La combinación produce ácido peracético (o ácido peroxiacético) que puede irritar y lesionar los ojos, la piel, los pulmones, la nariz y la garganta.