¿Qué es el yoga?

El vocablo proviene del sánscrito, y puede definirse en nuestro idioma como "unión", referido a la unión entre cuerpo, mente y alma. Es un conjunto de actividades que buscan eliminar el sufrimiento y recuperar una unidad esencial de todos los aspectos de nuestra persona y entorno.

¿En qué consiste el Yoga?

El yoga consiste en la realización de posturas, movimientos y técnicas de respiración que buscan relajar la mente, energizar y fortalecer el cuerpo, y armonizar nuestras energías con las vibraciones que nos rodean. Son actividades simples y gentiles con el cuerpo, sin un "nivel por alcanzar" ni un límite, es decir, cada quien realiza los movimientos en la forma e intensidad que puede, sin exigir al cuerpo en lo físico y sin llevar a la mente hacia pensamientos de competencia, de meta ni de frustración por no lograr un objetivo.

"En el yoga cada quien realiza los movimientos en la forma e intensidad que puede, sin exigir al cuerpo y sin llevar a la mente hacia la competencia."

El yoga y la conexión con uno mismo

Si bien el yoga es una actividad que se puede realizar en grupo con la guía de un instructor, lo cierto es que te conectas contigo mismo durante ejercicios, posturas y movimientos específicos, diseñados a partir de nociones energéticas y físicas, los cuales realizarás con la frecuencia, intensidad y modo que venga mejor para tu cuerpo.
Aunque vemos en TV a yoguis (quienes practican el Yoga) que realizan posturas sumamente flexibles y complicadas, lo cierto es que se puede comenzar por movimientos básicos, llevando el cuerpo hacia su propio límite.

En el yoga no forzamos al cuerpo, no provocamos dolor, tirones ni molestias, sino que hacemos estiramientos que dan placer, que oxigenan al cuerpo, que mejoran la postura y el estado general de la salud.
Al entremezclarse con técnicas de respiración profunda y lenta, el yoga produce bienestar en cada célula del cuerpo, y una total relajación de la mente sin llegar a planos alfa ni a estados de subconsciencia, sino en estados mentales plenamente consientes. Esto es, justamente, lo que provoca la relajación y el bienestar posterior a la práctica.

La filosofía del yoga

Cuando haces deportes, por ejemplo, tu mente y cuerpo se centran en esta práctica y se disfruta el "después" mediante un cuerpo más sano y resistente. En cambio, el yoga es una actividad constante, una filosofía de vida. Aunque no estés haciendo las posturas ni los movimientos, al practicarlo verás que tu respiración se hace más profunda y beneficiosa a lo largo del día, y sin que siquiera lo notes. Las técnicas de meditación, relajación, conexión con el Todo te acompañan el día entero, también por la noche.