El sol, la playa, el clima agradable y los colores naturales como beige, azul y blanco son los principales protagonistas del relajado estilo de decoración mediterráneo. Todos estos tonos se acentúan para aprovechar al máximo esta iluminación y evocar el mar, la arena, el agua y el cielo como componentes esenciales.
También te puede interesar...
Cómo elegir un sillón o sofá para cada ambiente
Se trata de llamar la atención sobre la belleza de materiales como la piedra, el algodón y la rafia en los textiles y la madera o el hierro forjado en los muebles. Es como la evocación que produce un cuadro de Sorolla y ver las escenas costeras. Transporta la tranquilidad y frescura del mar. Este diseño de gran riqueza histórica se originó hace miles de años en Grecia y se ha mantenido hasta hoy como protagonista en todos los rincones del mundo.
El sofá: protagonista de los espacios
Los muebles que ofrece la tienda online Sofá Center pueden ayudar a completar un estilo mediterráneo no solo en el salón, sino en cualquier espacio en el que haga falta esta pieza de mobiliario.
Es decir, el diseño y la decoración que lleva la impronta de las olas del mar sirve por igual en una oficina, una biblioteca o estudio, la sala de espera de una empresa, clínica o spa u otro sitio similar.
Los sofás son, por mucho, el mueble que captura las miradas en cualquier estancia. Pueden agruparse en dos o tres piezas de igual número de plazas y complementarse con poltronas individuales o puf y en función de las dimensiones y objetivos del lugar.
Los sofás de esta tienda en internet son referentes de cualquier tipo de estilo, pues destacan por piezas personalizadas para cualquier propósito. En el caso del estilo mediterráneo se aconseja lo siguiente:
1.- Los colores
Los sofás en tonos de azul (desde el más oscuro al celeste), así como los matices color arena y diferentes blancos son los mejores para el estilo mediterráneo. Pueden ser tapizados con polipiel, algodón con tratamiento anti manchas u otros textiles que evoquen a la naturaleza.
También te puede interesar...
Cómo Cuidar y Limpiar su Sillón o Sofá
2.- Los soportes
Al hablar de soportes de un sofá se refiere a la estructura más allá del acolchado y a las partes visibles. Internamente pueden ser de metal o madera, pero en el exterior se recomiendan las maderas claras o el hierro forjado.
No son aconsejables las patas metálicas brillantes como el acero inoxidable porque estas se ajustan más a estilos minimalistas o industriales.
3.- Las texturas
Los sofás mediterráneos deben tener texturas naturales. La tela es más recomendable que la piel, polipiel o los tapizados sintéticos. Sin embargo, estos no se descartan si se combinan con cojines y/o plaids que confieran calidez al mueble.
4.- El tamaño
Las dimensiones del sofá (como en cualquier mueble) deben estar determinadas por el tamaño de la habitación. En líneas generales, se puede hablar de que la pieza central sea de dos o tres plazas acompañado por una pieza igual o más pequeña.
Es decir, si el central es de tres plazas, su compañero puede ser de dos. Pero, si es de dos plazas, dos poltronas individuales harían bien juego.
El resto de elementos y los accesorios que acompañan al sofá
Dentro de esta categoría entran los siguientes:
- Mesa de centro: la cual se aconseja sea de madera o de madera con tope de vidrio, pues permite mayor luminosidad.
- Cortinas: en el estilo mediterráneo, las cortinas han de ser claras y vaporosas para que la brisa las pueda mover y dar esa sensación de estar en el mar. Sin embargo, debido a la necesidad de espacios energéticamente eficientes estas pueden ser sustituidas por estores o persianas alicantinas.
- Muebles auxiliares: se trata de mesas para las esquinas, estanterías, escaparates o ceibos que deben complementar un salón, estudio, biblioteca o sala de espera. La madera y el bambú son altamente recomendables.
- Iluminación: la decoración mediterránea tiene como meta llevar la luz del sol a los interiores. Las ventanas o ventanales son lo mejor, pero las lámparas son esenciales cuando cae la noche.
- Espejos: los espejos ayudan a reflejar la luz. Si no hay muchas ventanas, poner éstas al frente de una ayuda a crear la imagen de amplitud y de iluminación.
