Cómo arreglar un mantel en pocos minutos
Si ya no hay tiempo para corregir un mantel manchado o roto, te contamos una idea muy practica para disimular el defecto en pocos instantes.
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Arreglo de un mantel
Vienen invitados a cenar, y nuestro mejor mantel luce unas manchas horrendas. Desafortunadamente, no tenemos el tiempo suficiente para lavarlo, y sólo nos queda un viejo y deslucido mantel que da con el tamaño de la mesa, ¿cómo hacemos para disimularlo? Pues aquí tenemos una buena solución, muy sencilla.
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Pasos para arreglar un mantel en minutos
En primer lugar, vamos a plantar el mantel y disponerlo en la mesa. Luego, marcaremos la ubicación de los comensales, según la cantidad de invitados a esa cena en particular, o bien según la cantidad de comensales que quepan en la mesa. Podemos usar una tiza o un lápiz para marcar el mantel, sin dejar luego manchas.
A continuación, echaremos mano a las servilletas de tela que hacen juego con este deslucido mantel, o a servilletas de tela que tengamos sueltas. Claro, podemos también usar otras telas y retazos que tengamos en casa. Con estas telas haremos rectángulos (de preferencia de un tamaño de unos 45 a 50 centímetros de ancho por unos 30 a 35 de alto), y los coseremos o pegaremos en los espacios designados para cada comensal, a modo de individuales.
Podemos jugar mucho con la creatividad. Una linda idea es hacer dos tipos de "individuales", aprovechando diferentes telas y retazos, para crear una mesa de mantel excéntrico. También podemos usar otros materiales, como telas de arpillera o hasta individuales de papel, para un toque más hilarante.
Si los invitados son habituales, entonces podemos ir un paso más allá y usar fibras indelebles o pintura para telas, y escribir los nombres en sus lugares designados. Esta idea también será útil para pintar o dibujar sobre las manchas que pudiera tener el deslucido mantel.
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Si, en cambio, el mantel no tuviese manchas, sino que simplemente se tratara de un viejo mantel algo aburrido, podemos dibujar sobre él, escribir frases, o hacer con trazos sencillos las individuales, platos y cubiertos de cada comensal, para designar las ubicaciones sin personalizarlas. Esta idea es genial para los invitados más pequeños, que se divertirán colocando su vajilla sobre los trazos.
Con esta simple idea y en pocos minutos vamos a obtener un mantel personalizado y muy especial, que nos permitirá vestir la mesa en la temática elegida, como si hubiésemos pasado meses diseñándolo.