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Cómo comprar un vino

Cómo comprar un vino

Hay todo tipo de varietales, marcas y estilos de vinos, por lo que su elección no es simple. Pero más allá del sabor, hay algunos detalles que debemos fijarnos en el producto antes de comprar.

85% me gusta (20 votos) 20/05/13 por Eugenia

© Depositphotos.com/tonodiaz

Consejos para saber cómo comprar un vino

Hay técnicas de producción, reconocimientos por marcas, premios y medallas, y un sinfín de clasificaciones que buscan decir qué vino es el que debe de gustar más en el mercado consumidor.

Pero la elección de esta bebida (su varietal, su marca y otras consideraciones) dependerá exclusivamente del gusto del paladar que lo disfrute, en determinado momento y con esa compañía particular.

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Sea cual fuere tu decisión, te contamos qué debes tener en cuenta a la hora de adquirir esa preciada botella.

Qué tener en cuenta antes de comprar un vino en la tienda

  • La guarda del vino es lo primero a lo que debes atender. Muchos optan por adquirir sus bebidas en el supermercado, por practicidad y precio, pero estos sitios suelen tener pobres técnicas de guarda, manteniendo las botellas en almacenes de clima cálido y en posición vertical.
  • Lo mejor es adquirir el vino directamente en la bodega, si fuese posible, y de lo contrario, confiar en los servicios de vinotecas y tiendas especializadas, que conocen las maneras correctas de conservar los envases para la venta en sus óptimas condiciones de temperatura, posición, iluminación y demás. Incluso en estos sitios debes prestar atención a la manera en la que mantienen a sus productos; el clima debe ser agradable, algo fresco, lejos del sol y con iluminación fría.
  • Las luces dicroicas y otros sistemas calientes son geniales para dar efectos visuales a la tienda, pero grandes enemigos del vino por la temperatura y la intensidad lumínica que emiten.
  • También el sol es un aspecto a evitar; nunca adquieras una botella de vino que haya estado exhibida en la vitrina, o que demuestre haber estado mucho tiempo de pie en la góndola.

Detalles para conservar correctamente un vino

Los vinos se mantienen mejor cuando el líquido toma contacto con el corcho, por cuestiones químicas. Las botellas, entonces, deben mantenerse acostadas o reclinadas a 45°, con la boca hacia abajo.
Elige las que se ofrezcan en esta posición, y si el vendedor trae el producto de un almacén fuera de la vista, obsérvala; si hay polvillo en los hombros, el producto habrá sido mantenido en posición vertical.

También analiza la etiqueta al momento de la compra, la cual exhibirá claramente el año de producción, además de los datos enológicos, varietales y legales; así sabrás si se trata de un vino de guarda (que puede ser conservado hasta 4 o más años) o no.
En la contraetiqueta también puede haber información sobre la fecha recomendada para su consumo. En lo posible, elige las cosechas más jóvenes, del mismo año o del anterior, salvo recomendación específica.

"Nunca adquieras una botella de vino exhibida en la vitrina, o que demuestre haber estado mucho tiempo de pie en la góndola."

Detalles a la hora de elegir un vino

Consulta en la tienda o en la web de la bodega sobre las sugerencias del consumo. Cada vino tiene su mejor despliegue en determinada temperatura y en las copas apropiadas, para un mejor disfrute. Las tiendas y vinotecas dedicadas sabrán recomendarte estos detalles, e incluso el maridaje con comidas que permiten que la bebida se luzca mejor, optimizando así tu compra.

No te dejes llevar por el precio del producto, sino por tu propia experiencia y por la recomendación de conocedores que compartan tu estilo. Visita ferias y eventos en los que se realicen degustaciones gratuitas o a precios reducidos, para conocer más marcas y tenerlas en mente a la hora de adquirir vinos para tu hogar.

Cómo manipular el vino

El vino es considerado una de las bebidas más nobles. Se trata de un producto especial, que aporta numerosos beneficios a nuestra salud cuando se lo consume con deleite y moderación, en no más de una copa o copa y media a diario. Beneficia nuestro sistema circulatorio, aporta antioxidantes, y además, nos permite disfrutar de su exquisito sabor y textura. Siempre y cuando, claro, se trate de un producto cuidado y bien conservado, como aprenderemos a continuación.

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