Cómo mantener limpio el cepillo de dientes

Los cepillos dentales también necesitan mantenimiento durante los 6 meses de uso recomendado. Es importante mantenerlos limpios y libres de bacterias.

Cómo mantener limpio el cepillo de dientes

La limpieza del cepillo de dientes

¿Cuándo fue la última vez que higienizaste tu cepillo dental? Pues a casi todos nos sucede que la respuesta a esa pregunta es un largo "eeeehhhh". Y es que muy pocas personas poseen sistemas de esterilización e higiene de cepillos y elementos de cuidado dental; mientras tanto, nuestro cepillo dental sigue y sigue acumulando nocivas bacterias, sin recibir suficiente higiene (si es que no lo cambiamos luego de 6 meses, tal como recomiendan los odontólogos).

Lo mejor es contar con uno de estos sistemas caseros que permiten higienizar, desinfectar, y esterilizar nuestro cepillo de dientes y otros elementos de cuidado dental. Pero no muchos tenemos acceso a estos costosos artefactos.

Para todo hay una solución: te proponemos una idea simple de higienizar tus elementos de cuidado e higiene dental, sin gastar de más.

"Tras hacer una limpieza efectiva de tu boca, debes recordar mantener el cepillo dental alejado de los demás cepillos."

Cómo higienizar el cepillo dental

Al terminar de cepillar tus dientes luego de cada comida (o con la regularidad en que lo hagas), lleva el cepillo debajo del agua del grifo, a buena presión, eliminando los restos de pasta o crema dental, y de saliva, ente otros. Puedes remover las cerdas del cepillo dental con un dedo, para asegurarse de eliminar todas las suciedades, en particular los restos de crema dental que se asientan en la base de las cerdas, conservando bacterias, y que luego endurecen.

Tras hacer una limpieza efectiva de tu boca, debes recordar mantener el cepillo dental alejado de los demás cepillos. Los portacepillos que dan guarda a la zona de las cerdas son ideales, pues además de separar a los cepillos entre sí, evitan que el polvo del ambiente, las suciedades del aire y hasta el vapor de la ducha alcancen esta zona, que luego entrará en contacto con la boca.

Desinfección del cepillo con diversos métodos

Luego de enjuagar el cepillo, debes darle una adecuada desinfección. Puedes utilizar alcohol medicinal, haciéndolo correr por entre las cerdas y sus bases. También podrías utilizar peróxido de hidrógeno (la tradicional agua oxigenada) para la limpieza, rebajándola en agua limpia, filtrada o embotellada, para no comprometer la buena estabilidad de las cerdas del cepillo. Pero el enjuague bucal será más adecuado aún: logra eliminar virus y bacterias, y además, deja un agradable sabor mentolado en el cepillo dental.

Coloca enjuague bucal en un pequeño contenedor, en cantidad suficiente, y pon el cepillo dentro del líquido. Déjalo allí por unos minutos, removiéndolo si quieres, pero sin sacarlo a tomar contacto con el aire. Esto será suficiente para desinfectar toda la zona de contacto que el elemento tendrá con tus dientes y con todo el interior de tu boca, mejorando así la tarea de limpieza bucal al deshacerse de las indeseadas bacterias y otras amenazas.