Cómo elegir el cepillo de dientes para niños
Los dientes de los niños deben comenzar a asearse desde su aparición, para preservar tanto su salud como la de los más chiquitos de la casa.
Elección de un cepillo de dientes adecuado
Unos de los factores importantes para un buen cepillado es la elección de un cepillo de dientes adecuado. Si optamos por un cepillo duro, demasiado grande o incomodo para el niño, el aseo será incompleto y la posibilidad de que los dientes posean caries o manchas aumentará.
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Para una correcta elección del cepillo de dientes es importante tener en cuenta los siguientes consejos.
Cómo elegir el cepillo de dientes para niños
- El cepillo de dientes debe ser pequeño, esto facilitara mejor el movimiento dentro de la boca.
- Las cerdas del cepillo de dientes deben ser suaves y flexibles. Un cepillo pequeño, pero de cerdas dura, pueden lastimar tanto las encías como los dientes.
- Es recomendable que posea cabeza redondeada, ya que los de cabeza rectangular son más difíciles de que lleguen a todos los rincones de la boca.
- El mango del cepillo de dientes es mejor si es de goma o más bien blando, para que facilite el agarre del mismo.
- Lo aconsejable en cuanto a su reemplazo, es que el cepillo se cambia cada 3 meses, o antes si se observa muy gastado.
Otros consejos
Para ayudarlos en la tarea de lavarse los dientes, podemos tener en cuento las siguientes ideas
"El mango del cepillo de dientes para niños, es mejor si es de goma o más bien blando, para que facilite el agarre del mismo."
- Al comprar el cepillo deje a su hijo elegir el que tenga su personaje favorito (para que no elija alguno que no sea apto para su boca, darle la opción entre 3 o 4 modelos que se ajusten a las condiciones antes nombradas).
- Buscar un banquito o algo similar para que el niño pueda subirse y verse al espejo mientras se cepilla los dientes.
- Para que se enjuague la boca, utilice algún baso de plástico que tenga la imagen de algún personaje representativo para el niño.
- Cepíllese los dientes junto con el niño, será un momento para compartir y a la vez podrá imitar el cepillado y así ir mejorando su estilo.
- Comprueben ambos su sonrisa luego de lavarse los dientes. También pueden observarlos antes de lavarlos y después de hacerlo, para notar la diferencia entre ambos momentos, sobre todo cuando hemos comido alimentos que se adhieran a los dientes o queden entre ellos.
- Recordar a su hijo que nunca debe compartir su cepillo de dientes con otros niños, ni siquiera con sus hermanos.
