Lenguaje Corporal para el Trabajo
¿Quieres verte más poderoso en una negociación? ¿Necesitas relajarte rápido antes de la reunión?. Aprende estas posturas para mejorar el lenguaje corporal en la oficina.
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Estas posturas de lenguaje corporal para el trabajo podrán ayudarte en negociaciones, ventas, reuniones o cualquier otra situación.
Posturas de Lenguaje Corporal para la Oficina
Conocer las mejores posturas y posiciones de lenguaje corporal para el trabajo puede ser justo lo que necesitabas. Es que tomando ciertas posiciones puedes sentirte mejor, relajarte y hasta cobrar bríos, pero también utilizarlas para ganar jerarquía en una negociación, o para presentarte con una imagen mucho más adecuada en una reunión o en una venta. Ten en cuenta estos consejos y aplícalos siempre que necesitas
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Lenguaje corporal para sentirte mejor en la oficina
Hay algunas buenas posturas que puedes tomar para que tu lenguaje corporal te transmita a ti mismo un cambio de escena. Es decir: colocando tu cuerpo y tus extremidades en ciertas formas, te sentirás mejor, más confiado, más relajado, y preparado para cada situación que toque en tu trabajo.
Una de las poses más eficientes para sentirte mejor y ganar poder, afianzándote en tus creencias y mejorando tu humor, es la que se reconoce como la pose de Superman. Ponte de pie, separa tus pies un poco más que el ancho de tus caderas, y pon las manos a los lados de las caderas, tal y como lo hace el conocido superhéroe. Eleva el mentón, infla el pecho, y mantén esta posición por unos 60 o más segundos. No será sino hasta que la pruebes, que notarás que te llena de energías y te hace sentir más confiado.
"Colocando tu cuerpo y tus extremidades en ciertas formas, te sentirás mejor, más confiado, más relajado, y preparado para cada situación que toque en tu trabajo."
La pose de Superman te parecerá graciosa al principio, pero verás que te llenará de confianza y energías.
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Otra buena postura para el trabajo es la conocida como tijera. Párate bien erguido, y separa los pies al ancho de la cadera o un poco más. Luego, estira los brazos hacia arriba y afuera, como si estuvieras imitando la forma de una estrella, o como si estuvieras haciendo saltos de tijera. Esta pose te llenará de endorfinas, las hormonas de la felicidad.
¿Necesitas ganar algo de confianza para pedirle a tu jefe un aumento? Antes de la reunión, siéntate en tu silla, con la espalda recta y los hombros hacia atrás, lejos de tus orejas. Estira las piernas un poco hacia adelante, y entrecruza tus manos por detrás de la nuca, con los codos hacia los lados. Eleva el mentón y respira lento y profundo. Esta posición ha demostrado elevar la producción de testosterona, y te hará sentir relajado, seguro y bajo control. Además, si elevas los pies sobre tu escritorio, te sentirás más relajado y libre, lo que puede liberar tus jugos creativos si estás intentando solucionar problemas o crear ideas.
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¿Tienes muchos nervios y necesitas atender a tus clientes? Cierra la puerta de tu oficina y siéntate en tu silla, con las rodillas separadas, los pies apuntando hacia los lados, y los brazos abiertos, como una verdadera estrella de mar. Mantén la pose por unos 30 a 60 segundos. La posición ha demostrado reducir los niveles de cortisol, que es la hormona responsable del estrés.
Lenguaje corporal para el trabajo: negociación y reuniones
Si necesitas hacerte fuerte durante una negociación, una venta, un encuentro con tu jefe o cuando lo consideres apropiado, aplica estas buenas posturas de lenguaje corporal:
Pose para controlar la situación: Ponte de pie detrás de tu escritorio y, conservando la espalda recta, lleva ambas manos sobre la mesa (un poco más separadas que el ancho de tus hombros) e inclínate levemente hacia adelante, sin bajar la cabeza ni doblar la columna. Esta posición te hará ver seguro y confiado, en control de la situación.
Lenguaje para hacerte fuerte en una conversación: Yergue tu espalda, lleva los hombros hacia atrás (lejos de tus orejas, lo que abrirá tu pecho) y mantén el mentón paralelo al suelo. Mira a la persona a la cara y, mientras lo haces, cruza tus brazos frente al pecho. Esta postura propone que tienes poder, que tienes jerarquía, y que estás confiado en tus palabras.
"Si elevas los pies sobre tu escritorio, te sentirás más relajado y libre, lo que puede liberar tus jugos creativos si estás intentando solucionar problemas o crear ideas."
Mira siempre a los ojos: No juegues con tus manos, no mires al suelo ni encorves la espalda llevando los hombros hacia adelante. En cambio, procura siempre tener los hombros alejados de las orejas, y el pecho abierto. Mantén tu mirada en los ojos de tu interlocutor, y recuérdate a ti mismo sobre tu verdadero valor para mantenerte confiado, relajado y seguro en cualquier negociación.
Estos consejos sobre el uso del lenguaje corporal en el trabajo se basan en los resultados de la investigación de la Psicóloga Amy Cuddy. Puedes ver su presentación en TED siguiendo este enlace.