Cómo elegir entre un Reloj de movimiento Mecánico y uno de Cuarzo

El primer punto es el de su precisión. Los relojes de movimiento de cuarzo son, gracias a la conformación de su estructura y sus partes, más precisos que los mecánicos, los que a su vez a lo largo del tiempo pueden quedar expuestos a roces y daños leves, que terminan por afectar su funcionamiento... aunque sólo sea visible a ojos experimentados. A su vez, los relojes de cuarzo, debido a los materiales y técnicas de fabricación -entre otros factores- son más económicos, razón por la cual se los elige.

Pero el funcionamiento de un reloj mecánico es un asunto casi romántico, ideal para los amantes de la relojería. Estos pequeños objetos, que no son más que testimonios de historia misma, resultan ser irreemplazables para muchos, aunque su costo hace que a menudo sólo queden en manos de los verdaderos entusiastas de estas mecánicas.

Entre los relojes mecánicos podemos encontrar los automáticos, que se cargan por el movimiento del portador y un rotor, y los de remontaje manual, o "a cuerda", que son los más tradicionales. Entre los de cuarzo, la mayoría exhibe un funcionamiento gracias a un generador-condensador, aunque hoy en el mercado podemos encontrar modelos híbridos que mezclan las bondades y virtudes de ambas versiones.