Cómo Viajar al Sudeste Asiático

Uno de los sitios más elegidos por los turistas aventureros es el Sudeste de Asia. Las razones son variadas, además del coste. Es perfecto para “abrir la mente” y conocer culturas completamente diferentes a lo que estamos acostumbrados. Asia es todo un mundo, por la cantidad de habitantes, por la diferencia de idiomas y etnias, por los millones de menúes, por la contraposición entre el campo y la ciudad, por las zonas completamente tecnológicas y las áreas donde sólo se usa la radio.

Si estás organizando un viaje al sudeste asiático, has de saber que la preparación previa es muy importante. Es cierto que para cualquier destino de vacaciones es preciso organizar con anticipación, sin embargo, para esta región del planeta debes estar más atento a ciertas cuestiones.

Vuelos para el sudeste Asiático

Los aéreos pueden ser un poco costosos ya que los destinos son bastante remotos de Europa y de América. Es posible conseguir buenos descuentos comprando con anticipación. Piensa que no siempre conseguirás vuelos directos y tendrás que hacer varias escalas hasta llegar (lo que además es bueno porque de lo contrario, tendrás que pasarte muchas horas en el mismo avión). Conoce las ofertas aéreas y planifica con tiempo cuándo viajarás.

"El mejor momento para viajar al sudeste asiático es en los meses de septiembre, octubre, marzo y abril, cuando el clima es más seco."

Vacunas necesarias

Al viajar al sudeste asiático debes prestar atención a la vacunación. Esto es vital, ya que las condiciones médicas o sanitarias en esta región no son las mejores. Algunas naciones exigen a los turistas haberse vacunado contra ciertas enfermedades antes de ingresar (por ejemplo, la de fiebre amarilla en Tailandia). Otras "adicionales” que no pueden faltar en tu carnet son la de la hepatitis, la meningitis y la rabia. A su vez, es necesario realizar un tratamiento de 15 días contra la malaria. Consulta en la Embajada de cada país que visitarás para conocer las vacunas exigidas.

Visas y permisos para viajar al sudeste asiático

En la mayoría de los países de la región no se requiere un permiso de viaje para estancias menores a los dos meses, en otras ocasiones tendrás que tramitarlo una vez que llegues a destino. Al igual que ocurre con las vacunas, mejor consulta los casos particulares en las Embajadas, para no tener problemas. Y no olvides tu pasaporte en vigor y la documentación de todos los que viajarán contigo.

El mejor momento para viajar

El clima en esta zona es bastante caluroso. El mejor momento para viajar al sudeste asiático es en los meses de septiembre, octubre, marzo y abril, cuando es más seco. La temperatura promedio es de 30°C todo el año, por ser de clima tropical. La única diferencia es que en los demás meses llueve todo el tiempo. No se aconseja llevar demasiada ropa, ya que por un lado hace calor, y por el otro, las prendas allí son muy asequibles y conviene comprar en los diferentes destinos. No olvides llevar repelente para insectos, un sombrero y factor de protección.

Tips al viajar al sudeste asiático

Una vez que hayas llegado al sudeste asiático, (o bien mientras estás organizando el viaje), es bueno que elijas qué países o ciudades visitar, dónde dormir, qué comer y cómo viajar:

1. Países a visitar: Un recorrido típico por la región incluye Tailandia, Indonesia, Malasia, Vietnam, Laos y Camboya. Los que permanecen más tiempo en la zona añaden a su ruta Filipinas, Singapur y Hong Kong. Los sitios más costosos son estos dos últimos.

2. Dormir en el sudeste asiático: La oferta es bastante amplia y las alternativas suelen ser muy económicas para alojarse en la zona. Hay hoteles para todos los presupuestos, las habitaciones dobles rondan los 15 dólares, aunque hay hostels donde dormir por 2 dólares. Elige lo que se adapte a tu bolsillo, pero también presta atención a las comodidades, limpieza, etc.

3. Comer: La comida es más que variada. Los mercados y puestos callejeros son los elegidos por los turistas para degustar la gastronomía típica. Si buscas un sitio más limpio o higiénico, con procedencia “decente” de los alimentos, puedes ir a un restaurante en el centro de las ciudades, igualmente, en las ferias podrás conseguir platillos hechos con materia prima fresca por menos de un dólar. Si no te animas a probar el menú local, puedes elegir comida del tipo occidental, como pizzas o hamburguesas, que es más cara y se sirve sólo en zonas turísticas.