Cómo Tener más Confianza en ti Mismo

Lo que piensas, se hace realidad

No con ponerte a pensar en que eres millonario, sin trabajar y ahorrar, lo serás. Pero lo cierto es que en muchas cuestiones, principalmente en las emocionales, lo que piensas es la realidad. Si constantemente te bombardeas con ideas de menosprecio hacia ti mismo, te piensas inútil para los proyectos, repites una y otra vez frases negativas en tu mente, ese es el mundo que creas para ti: pensar en negativo, crea ambientes negativos a tu alrededor… comenzando por tu mente.

¿Has notado cómo hay personas que, pese a no tener un cuerpo “perfecto” ni tener una belleza física evidente, resultan completamente atractivas? Si te preguntas por qué, seguramente aparecerán frases como “su sonrisa es contagiosa” o “tiene esa cierta vibra de éxito”. Hay un secreto que todas esas personas comparten: son seres confiados en sí mismos, se saben capaces de hacer y de aprender, y no se piensan como con límites o negatividad. Es su auto confianza la que les da esa belleza tan seductora, que nada tiene que ver con el físico o con sus finanzas y bienes.

"Si constantemente te bombardeas con ideas de menosprecio hacia ti mismo, te piensas inútil para los proyectos, ese es el mundo que creas para ti: pensar en negativo, crea ambientes negativos a tu alrededor."

Cómo confiar más en ti mismo

Lo primero que necesitas hacer es vencer las ideas negativas que tienes en tu mente. Comprende que todas las personas tenemos virtudes, y también defectos: absolutamente nadie es perfecto. Pero necesitas cambiar tu enfoque y concentrarte en lo que sí eres, lo que sí tienes, lo que te diferencia de los demás. Cuando inundes tu mente con pensamientos positivos, tu exterior y tu “vibra” comenzarán a demostrarlo. Párate frente al espejo y haz un simple (aunque a menudo: ¡también difícil!) ejercicio de hallar tres cosas buenas en lo que veas. O dos, o al menos una. No dejes de observarte hasta que encuentres ese punto fuerte, ¡y úsalo a tu favor!

Lo que piensas es lo que eres. Si te sabes feo, si te concentras en todos los defectos físicos o en tu falta de curvas, esa es la imagen que proyectas, y probablemente no resultarás atractivo en el sentido estricto de la palabra. Si te sabes ineficiente en el trabajo, inadecuado para los proyectos, incapaz de llegar a más, entonces difícilmente tu jefe te tendrá en cuenta para ese ascenso.

Para tener más confianza en ti mismo debes olvidarte de las comparaciones. Primero, porque todas las personas somos únicas: tenemos fortalezas y debilidades simultáneamente. Y tus fortalezas pueden no ser las de otros, ni tus debilidades. Y si te comparas en cuanto a tus habilidades físicas respecto de las de un deportista profesional, probablemente salgas perdiendo, ¿verdad?

Segundo, porque nunca sabes la realidad de la vida de los demás. Quizás bases tus pensamientos en comparaciones inútiles, como “quisiera tener la belleza física de mi prima” o “me gustaría tener tanto dinero como mi vecino”. Pero lo que no sabes es que esa bella prima y ese acaudalado vecino tal vez desearían tener tus habilidades para las matemáticas, o para el canto, o quisieran que su jardín fuera como el tuyo, o tener otras de tus características, y ni siquiera lo notas. ¿Sabes por qué ellos no lo demuestran? Pues probablemente porque no se comparan, o porque han aprendido a aprovechar sólo lo que tienen a su favor, en lugar de estar quejándose por lo que no tienen.

No dejes que te derriben. Las opiniones de los demás no deben reflejar lo que tú pienses de ti mismo. Todos nos encontramos, alguna vez en la vida con personas tóxicas que se dedican a señalar nuestros defectos, que nos comparan y que nos dicen que “no podremos”. ¡Aléjalos de tu vida!. Desestima sus comentarios hirientes, y concéntrate en conocerte a ti mismo y en aprender todo lo que sabes hacer, y lo que haces (y harás) a la perfección ¡Confía!