Cómo Aprender a Concentrarse

Es que cada vez es más difícil mantenerse focalizado en una tarea porque la mente se ha acostumbrado a miles de estímulos al mismo tiempo. La tecnología avanza a pasos agigantados y hay demasiada información disponible a nuestro alrededor. Los dispositivos móviles, la música, los carteles de publicidad, las luces de neón... todo eso va logrando que el cerebro esté cada vez menos concentrado y pueda dispersarse con mayor facilidad. Si a eso le sumamos el estrés y los problemas personales, el insomnio o la falta de sueño, el pensamiento continuo en el futuro y la curiosidad de saber qué está pasando en las redes sociales, entonces se complica más la situación.

La frustración no tarda en aparecer cuando no podemos concretar las metas ni tachamos todas las actividades que teníamos para ese día. La procrastinación (dejar todo para después) a veces puede estar causada por una falta de tiempo, no por quedarse acostado o sentado mirando el techo.

"Es importante aprender a concentrarse para poder terminar con las obligaciones a tiempo, y disfrutar del resto de tu jornada como desees."

En la actualidad, es frecuente estar siempre a contra reloj, recuperando el tiempo perdido de lo que no hicimos ayer, antes de ayer, la semana pasada. Parece que el tiempo es nuestro mayor enemigo, cuando en realidad, es nuestra falta de concentración y descanso.

Tips para aprender a concentrarse

Tener que reconstruir los pensamientos y focalizar la atención nuevamente en algo es una gran pérdida de energía, de tiempo y hasta de dinero. Si tienes en cuenta los siguientes tips para aprender a concentrarse ya no volverás a cometer errores, no tendrás que quedarte haciendo horas extras, no perderás tiempo que podrías estar pasando con tu familia o amigos, estarás más calmado y relajado, etc.

Desconéctate y aprende a concentrarte

¿Qué pasaría si un día del fin de semana no estás pendiente del móvil? ¡Nada! Tu vida continuaría. Poder desenchufarse un poco del ajetreo diario es saludable para la mente y para el cuerpo. Prueba un sábado no usar ningún aparato electrónico y te sentirás realmente renovado y feliz. ¡Hay miles de cosas para hacer que no tengan que ver con un dispositivo móvil o electrónico!. Por ejemplo, salir a caminar, jugar con los hijos, limpiar la casa, leer un libro (físico, no en pdf), dormir, cuidar el jardín, hacer la compra, pasear, andar en bicicleta, visitar a tus abuelos, etc.

También puedes desconectarte cuando regresas a casa cansado del trabajo. Destina tres días a la semana para apagar el móvil apenas pones un pie en el umbral de tu hogar. ¡Pasarás momentos de calidad con tu familia que nada ni nadie te lo podrá pagar! No hace falta que te vayas a vivir a una isla desierta, con no estar con el teléfono al lado del plato o en la mesilla de noche es suficiente, un excelente paso para comenzar.

Acepta que no puedes con todo

A veces los problemas de concentración se deben a que tenemos una agenda tan amplia de pendientes que el cerebro no sabe por donde empezar. Querer hacer cientos de cosas en un mismo día es física y mentalmente imposible. ¡Date un respiro!. Trabajo, universidad, hogar, pareja, amigos, hijos, cursos, gimnasio... ¿todo eso en un mismo día? ¡Imposible!

Determina cuáles son tus prioridades y haz cada cosa a su debido momento. Si la mente tiene menos pendientes en su listado, será más fácil que se pueda centrar en uno a la vez. Cuando estés trabajando en un proyecto, no te pongas a pensar en la siguiente tarea que tienes para completar. Una cosa a la vez, no lo olvides.

Visualiza cómo te gustaría que fuera tu realidad

Esta técnica para aprender a concentrarse es muy interesante, porque te ayuda a poner bien en claro tus objetivos. Si quieres tener armonía en casa, no te quedes trabajando hasta tarde, si no deseas que tu cocina o sala sean un desastre, que en la nevera no haya nada de comida, tómate el tiempo para limpiar y hacer las compras; si quieres recibir una felicitación de tu jefe o evitar una reprimenda, entonces, ponte a trabajar. Todo es a favor de tu salud. El objetivo de este ejercicio es pensar si lo que estás haciendo hoy te lleva a donde quieres estar mañana.