Trucos para Aliviar Dolores

Antes de actuar, comprende la molestia

Tú conoces tu cuerpo mejor que nadie. Sabes cuándo hay algún alérgeno en el aire que cause algún tipo de problema en tu propio organismo. También sabes cuándo hay alguna emoción que pueda estar causándote estrés, tensión, ansiedad, tristeza o cualquier otra reacción, y cómo es que puede eso impactar en tu sistema. Sólo debes prestar atención, y aprender a escuchar lo que tu cuerpo y tu mente te estén diciendo en cada momento.

Por otro lado, cuando sientas algo fuera de lo habitual en tu organismo (sea que puedas o no ver las señales, como inflamaciones, irritaciones, fiebres, dolores u otros), y que no logres determinar qué es lo que puede estar provocando esta situación, es importante que consultes a tu médico de cabecera. En lo que respecta a tu salud y a tu bienestar, es mejor consultar y saber, que adivinar y perder tiempo.

"Las técnicas de respiración y los pensamientos positivos ayudan a calmar los nervios. Pero cuando necesites una solución extrema, prueba con lavar tus manos y tu rostro con agua fría."

Trucos para aliviar dolores y molestias

La próxima vez que sientas estos dolores, molestias e incomodidades, prueba con estos trucos geniales:

1. Dolor de muelas: El dolor de muelas o de cualquier otro diente es una verdadera molestia. Para aliviarlo no hace falta que llenes tu organismo de analgésicos: sólo frota con un cubo de hielo la zona de la palma de tu mano entre el dedo índice y el pulgar. Las terminales nerviosas ubicadas allí se relacionan con las de tu rostro, por lo que aplicar frío y una suave fricción aliviará tu dolor de muelas casi milagrosamente.

2. Nariz llena: Cuando tengas rinitis, humedad en la nariz y pareciera que no hay pañuelo ni inhalador que pueda ayudarte, simplemente pon las puntas de tus dedos sobre las cejas y presiona suavemente, mientras presionas la punta de la lengua contra el paladar (el “techo” de tu boca).

3. Picazón en la garganta: Nada peor que una garganta que pica, y que no se calma bebiendo té con miel o haciendo gárgaras de agua con sal. Cuando te suceda, prueba con rascar tu oreja. ¡Así es!. Al estimular las terminales nerviosas ubicadas en la parte externa y el lóbulo de la oreja, se crea un reflejo que puede provocar pequeños espasmos musculares en la garganta, calmando la picazón.

4. Quemaduras: Las quemaduras son algo serio, pues pueden ser el inicio de una infección o de serias consecuencias de salud, estética y bienestar. Si fuera leve (una salpicadura de una pequeña gota de aceite caliente, por ejemplo) presiona la zona de inmediato con tus dedos, para estabilizar la temperatura de la piel. Luego, sumerge la zona afectada en agua fría, y déjala allí por algunos minutos, o hasta que el dolor ceda.

Trucos para calmar nervios y ansiedad

Hay muchos tips para calmar tus nervios o tu ansiedad. Estos son tres de los más efectivos:

Nervios previos: Las técnicas de respiración y los pensamientos positivos ayudan a calmar los nervios. Pero cuando necesites una solución extrema (para ese último minuto antes de entrar a dar el examen o a presentar ese informe), prueba con lavar tus manos y tu rostro con agua fría. Al contacto con el agua, el cuerpo naturalmente reduce la frecuencia cardíaca y normaliza la respiración. Para potenciar aún más el efecto de la técnica, moja tu rostro con agua fría mientras mantienes la respiración, y libera el aire lentamente por la boca. Termina bebiendo unos sorbos de agua y notarás una diferencia inmediata.

Ansiedad: Nada peor que esperar que algo suceda, como cuando estás a punto de encontrarte con esa persona que llena tu estómago de mariposas. ¿No sabes cómo calmarte?. Prueba con soplar tu dedo pulgar. Hazlo llenando tus pulmones y soplando lentamente por la boca, hasta vaciarlos. Así estabilizarás la respiración, lo que regulará el ritmo cardíaco, a la vez que te distraerá, pues te enfocas en la tarea.