La importancia de reír y de llorar

Los efectos de la risa

Reír no sólo es un festejo a un chiste hilarante, a una situación amena o a un momento grato. Reír es una respuesta natural de nuestro organismo, con múltiples beneficios para la salud física, mental y emocional.

Reír es un mecanismo que modifica nuestro ritmo cardíaco. Las bocanadas de aire promueven una mayor y mejor oxigenación de cada célula de nuestro cuerpo y, además, propicia la liberación de endorfinas, drogas naturales que produce nuestro cuerpo que nos ayudan a combatir dolores y malestares, funcionando como un analgésico natural.

"Reír nos coloca en un marco mental incomparable, alegre, positivo y liberador."

Pero hay mucho más en la risa. A nivel corporal, la respuesta sonrisa es un gesto de satisfacción que nace en los primeros días del bebé: luego de amamantar, al llegar a un estado de satisfacción, el rostro se relaja y las mejillas se elevan, dejando en el rostro del bebé una sonrisa inigualable.

Conforme la psique se va desarrollando, la sonrisa se convierte en un gesto comunicativo de aceptación, de satisfacción, de seguridad.

Ya en el organismo plenamente desarrollado, la sonrisa evoca, con su mera presencia, todas esas buenas sensaciones y beneficios para la salud física y emocional, pues reír nos coloca en un marco mental incomparable, alegre, positivo y liberador.

Los efectos del llanto

Las lágrimas que asoman por nuestros ojos tienen múltiples orígenes y razones, y también múltiples propósitos. Las lágrimas limpian las córneas, y también lubrican todo el globo ocular para un óptimo funcionamiento. Pero son más que eso: las lágrimas son, a nivel figurativo, la manera en la que nuestra mente libera las emociones fuertes. Sera la alegría extrema, la sorpresa, o también las penas, al salir las lágrimas de nuestros ojos y rodar por nuestras mejillas, se llevan con ellas los cúmulos de sensaciones y emociones exacerbadas.

Cuando atraviesas por un mal momento y te dejas todas esas emociones dentro de tu mente, el marco mental se nubla, se opaca, y aparecen las trabas autoimpuestas. Así, también se desarrollan las condiciones óptimas para malestares, dolores, enfermedades y demás. Por eso, el llanto es un mecanismo de protección y de liberación de estas trabas emocionales, tan necesario para nuestra salud física como lo es la risa.

También, el llanto tiene una función biológica. Al llorar se libera adrenalina y noradrenalina, hormonas que nos preparan para luchar contra los obstáculos o para "huir del enemigo" (la llamada "respuesta de luchar o huir"). También se fomenta la liberación de oxitocina, que funciona en el organismo adulto como un relajante excepcional.