Cómo saber si un niño no ve bien y cómo prevenir los problemas de visión
La dificultad para ver en los niños puede provocar problemas no sólo físicos, sino también sociales y educativos. Es importante conocer los síntomas para saber si tienen problemas de visión.
Si tu niño necesita gafas, debes ayudarlo a entender que usarlas es importante, de lo contrario, podrá aumentar su problema de visión.
¿Cómo saber si un niño no ve bien?
En la mayoría de los casos, los problemas de visión se detectan en el preescolar o durante el primer año de escuela, pero muy pocas veces los niños logran decir que no ven bien, ya que para ellos “esa forma de ver” es la normal; toda su vida vieron igual y no tienen posibilidad de comparar.
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Cómo detectar problemas de visión en los niños
Por lo general, los niños que no ven bien se muestran poco atentos durante la clase, se encuentran molestos o enojados cuando tienen que escribir o manifiestan dolor de cabeza, cuello o espalda.
Los docentes saben reconocer cuándo los niños se inclinan demasiado sobre el papel para dibujar o escribir, o cuándo parpadean en exceso. Pero el no detectar a tiempo que estos son síntomas de algún problema de visión, puede provocar que los niños comiencen a fallar en el ámbito académico y a sentirse frustrados.
Cómo prevenir problemas de visión en los niños
Para prevenir o solucionar cualquiera de los problemas de la visión en los niños, lo mejor es que a partir de los tres años, lleves a tu niño periódicamente al oculista, en especial si más de una persona en la familia utiliza gafas.
En casa es bueno observar si el niño se acerca mucho al televisor, a los libros o al papel, o en el caso contrario, si se aleja mucho. Observa si lagrimea o se rasca los ojos con frecuencia, presta atención si te comenta que le duele la cabeza o el cuello.
Frecuentemente, los problemas de la visión se solucionan con gafas… pero aquí se puede presentar un nuevo problema… lo mejor es dejar a los niños que elijan el modelo que más les guste, en este caso un óptico con experiencia sabrá mostrarle armazones bonitos y que le queden bien, que sean seguros para la edad y que se adecúen a las necesidades del niño.
Si tu niño necesita gafas, debes ayudarlo a entender que usarlas es importante, de lo contrario, podrá aumentar su problema de visión, incrementando los dolores de cabeza y otras partes del cuerpo, impidiendo que se mantenga concentrado y llegue a fallar en los estudios.
