El cubo de Rubik creado por Erno Rubik es el más famoso rompecabezas de la historia y a la vez un desafío que muchos han querido conquistar, para resolverlo como todo un pro, es preciso saber se divide en 3 capas, Superior, Intermedia e Inferior y en dicho orden se debe resolver, además las piezas centrales de cada una de las caras son las que establecen los colores y estos tienen siempre la misma disposición. Conociendo estos detalles, los pasos para resolverlo son:
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- Cruz blanca: el primer paso para resolver cubos de Rubik es hacer una cruz blanca poniendo atención al color de las piezas centrales de los lados, se trata de mover los bordes blancos a sus correspondientes lugares sin dañar los que ya están listos.
- Esquinas blancas: se trata de ordenar todas las esquinas de color blanco para así finalizar la primera cara.
- Segunda capa: como ya está organizada la capa blanca, es momento de voltear el cubo boca abajo para continuar con el lado que aún no se ha resuelto, en este punto es donde se hacen necesarios los algoritmos o secuencias derecho e izquierdo, los cuales insertan la pieza de borde hacia arriba, esto desde la capa superior en la capa intermedia sin tener que dañar la cara blanca que ya se ha organizado. Cabe destacar, en caso de que una pieza de borde se encuentre en su lugar en la segunda capa orientando mal, se debe utilizar el algoritmo dos veces.
- Cruz amarilla: ahora es momento de resolver la última capa, para ello hacer una cruz amarilla en el área superior del cubo. En este caso no hace falta prestar atención a los colores de los dados y se pueden presentar 3 patrones diferentes en el área superior y el algoritmo o secuencia necesario para pasar de un estado a otro es Frontal, Derecha, Arriba, Derecha antihorario, Arriba antihorario y Frontal antihorario. Ahora bien, si se ve un punto es necesario aplicar el algoritmo 3 veces, si hay una línea horizontal solo una vez y si se forma una L de color amarillo 2 veces.
- Bordes amarillos: una vez hecha la cruz amarilla en el área superior del cubo, poner las piezas amarillas en sus sitios finales y así hacer coincidir con los colores de las piezas centrales de los lados.
- Esquinas amarillas: las últimas esquinas de la capa son las que faltan por resolver, es preciso llevarlos a la posición correcta, para ello ubicar una pieza que esté en el sitio adecuado, moverlo a la esquina frontal derecha superior y seguidamente utilizar el algoritmo Arriba, Derecha, Arriba antihorario, Izquierda antihorario, Arriba, Derecha antihorario, Arriba antihorario e Izquierda, esta secuencia se debe hacer 2 veces para la rotación inversa de las piezas y si ninguna de las esquinas amarillas se encuentra en su lugar, aplicar el algoritmo solo una vez.
- Orientar las esquinas amarillas: como último paso es necesario orientar las esquinas amarillas, para ello sostener el cubo poniendo la esquina sin resolver en la esquina frontal derecha superior, después aplicar la secuencia de abajo 2 o 4 veces hasta lograr la correcta orientación.
Después girar la capa superior para poder mover otra pieza amarilla que no se ha resuelto, a la esquina frontal derecha superior del cubo y repetir la secuencia o algoritmo Derecha antihorario, Abajo antihorario, Derecha y Abajo.
Es importante tener precaución para no mover las dos capas inferiores entre las secuencias y tampoco rotar todo el cubo, repetir hasta que el cubo de Rubik esté resuelto. Se trata de ser constante y practicar mucho, así será posible resolver hasta cubos de rubik raros, pues existen algunas interesantes variaciones.
