¿Por Qué los Niños se Marean en el Coche?

Para que los más pequeños recuperen el gusto por los paseos y los traslados, descubre los motivos que provocan los mareos al viajar en coche y algunos métodos para evitarlo, convirtiendo cada viaje en un deleite para toda la familia.

¿Por qué los niños se marean en el coche?

El mareo por movimiento o cinetosis es un mal habitual caracterizado por las descomposturas al estómago, las náuseas y vómitos, y tiene causas de lo más diversas. Además de la obvia razón de recorrer senderos demasiado sinuosos o con irregularidades, también puede provocarse por motivos internos al organismo, incluyendo:

• Una descoordinación entre las señales que envía el oído interno (responsable de la sensación de equilibrio) y el cerebro.
• Una descoordinación entre las señales visuales y el cerebro (mayormente cuando leen o fijan la vista en puntos móviles durante el recorrido).
• Una descoordinación entre los tres anteriores: ojo, oído interno y cerebro (el oído sabe que nos movemos, pero los ojos se fijan en un punto inmóvil).
• Trastornos digestivos ocasionados por nervios o estrés, producto del encierro, frío, o de las ansias por el viaje en sí.

"Los niños suelen fijar la vista en un punto fijo mientras viajan. Así, mientras su oído interno indica al cerebro que hay movimiento, el ojo envía señales de quietud, y ahí se produce la cinetosis."

Pero, ¿por qué lo experimentan más los niños que los adultos?. Es que los mayores solemos ir viendo el camino o el paisaje. Los niños, que se aburren mucho más rápido que nosotros, suelen fijar sin intención la vista en el tapizado del asiento, en el respaldo, sus manos o juguetes pequeños. Así, mientras su oído interno indica al cerebro que hay movimiento, el ojo envía señales de quietud, y ahí se produce la cinetosis más frecuente.

Cómo evitar que los niños sufran mareos al viajar en coche

Procura que tus hijos cambien el foco de atención visual entre objetos quietos y el paisaje de las ventanillas. Por ejemplo, cuando un niño mira al otro durante un juego, podrá ver que detrás de su hermano el paisaje se mueve. Sumado al entretenimiento que lo distraerá del encierro, podrás evitar los mareos fácilmente.

Evita que lleven juegos, juguetes o material de lectura en los que enfoquen su vista. Prefiere los audiolibros y las canciones entre todos, que los hará bailar en sus lugares y evitará que fijen su vista en puntos inmóviles. De igual modo, evita que el coche esté demasiado frío o demasiado cálido: cuando el clima lo permita, abre un poco la ventana para que haya una suave brisa en el habitáculo, de manera constante.

Si tus hijos suelen marearse con demasiada frecuencia y debes hacer un trayecto largo (como ir de vacaciones), elige viajar por la noche, algunas horas luego de cenar. Tus hijos ya habrán digerido la comida y probablemente tengan sueño, y podrás dormirlos ni bien el coche comience a andar. Esto les hará el trayecto más rápido y tranquilo, sin mareos ni náuseas.

En casos extremos puedes llevar pequeñas bolsas de papel reforzado o plásticas, para recoger allí los vómitos, y ten siempre un abrigo liviano y ropa para que se cambien, si sucediera lo inevitable.