Cómo hacer que tu Perro Deje de Ladrar

Pero antes de perder la paciencia o tirar la toalla, deberías saber que cuando un perro ladra, la mayoría de veces terminamos motivándolo con respuestas involuntarias. El secreto para acabar con este comportamiento es actuar de forma opuesta a lo que el quiere. Por ejemplo, si ladra porque necesita algo, no se lo entregues. Si ladra a otro perro, llévalo a otra parte. Si ladra porque quiere jugar, intenta hacer otra cosa. Si bien esta forma de educar es un poco dolorosa para cualquier dueño, con el tiempo puede conseguir resultados inmediatos.

"Al principio no será fácil, pero con algo de práctica es posible conseguir que tu perro deje de ladrar en todo momento."

A continuación, te proponemos algunos consejos para domesticar a tu perro de forma práctica y sencilla. ¡Manos a la obra!

Tips para que el perro deje de ladrar

Es realmente incómodo tener que salir de casa o recibir visitas sin que nuestra mascota deje de ladrar a todo el mundo. Para corregir este comportamiento, debemos voltearlo para distraer su vista con otro objeto. Al principio no será fácil, pero con algo de práctica es posible conseguir que tu perro deje de ladrar en todo momento.

Otro método que podemos implementar es conocido como "time out", un pequeño castigo que se realiza inmediatamente después de un mal comportamiento. Básicamente, tienes que ponerte a su nivel en el piso e inmovilizarlo con las manos hasta que logre calmarse. No cedas a sus ojos vidriosos y evita jugar o acariciarlo. Tampoco te sientas tentado a hablarle, simplemente deja pasar un par de minutos hasta que tu perro deje de ladrar.

Otros métodos para que le perro deje de ladrar

No todo tiene que ser castigo. Una buena forma de que el perro deje de ladrar es premiando su buen comportamiento, de manera tal que pueda diferenciar las dos situaciones que se presentan. Sólo recibirá un premio o una muestra de afecto cuando deje de ladrar o hacer travesuras. Esto no ocurrirá de la noche a la mañana, por lo que debes armarte de mucha paciencia.

Otro consejo para domesticar a tu perro y que no ladre es enseñarle a “hablar” de una forma simbólica. Cada vez que necesites algo pronuncia la palabra “habla”, creando un comando en común que ambos puedan comprender. Adicionalmente, extiende tu mano con un pequeño premio para que relacione la palabra “habla” con recompensa, evitando así que los ladridos continúen. Al cabo de varios días de intenso trabajo, lograrás que tu mascota obedezca tus órdenes.