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Cómo hacer un Masaje Tailandés

Cómo hacer un Masaje Tailandés

El masaje tailandés te ayuda a liberar tensiones y aliviar malestares en todo el cuerpo. ¿Quieres saber de qué se trata?. Lee atentamente esta nota

26/08/14 por Eugenia

© Depositphotos.com/michaeljung

En el masaje tailandés se combina presión, movimientos y estiramientos asistidos.

¿Qué es el Masaje Tailandés?

El masaje tailandés es parte de la corriente de la medicina tradicional (antiguamente conocida como "medicina alternativa"), tendiente al alivio de malestares mediante la manipulación de canales y puntos en el organismo, además de estiramientos en posturas bastante similares a las del Yoga.
Conoce sus principios y técnicas básicas para poder hacer un masaje tailandés en casa, y tener el cuerpo en sintonía con el espíritu.

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Bases del masaje tailandés

Esta técnica se basa en el principio de que nuestro cuerpo está impregnado de aire ("lom") que ingresa por nuestros pulmones y se esparce por todo el organismo a lo largo de canales ("sen"). Mediante técnicas de presión y movimientos en estos vasos y en constante conocimiento y conexión con la respiración, el terapeuta "trabaja" el aire impulsándolo hacia los orificios, permitiendo su salida y, con ello, retirando las malas energías (y también las toxinas) que provocan los dolores en el cuerpo.

Esta corriente de acción es hoy parte de lo que la Organización Mundial de la Salud ha reconocido dentro de las medicinas tradicionales, y hasta se ha destacado su importancia y utilidad para el alivio de dolencias y enfermedades diversas en la "Estrategia de la OMS sobre medicina tradicional 2002–2005".

"La persona que recibirá el masaje tailandés debe mudarse a una ropa liviana y que permita su total movimiento."

El ambiente relajante es fundamental para un masaje tailandés.

Movimientos y técnicas del masaje tailandés

La persona que recibirá el masaje tailandés debe mudarse a una ropa liviana y que permita su total movimiento. El terapeuta (o quien haga el masaje) creará un ambiente de relajación y calma, para permitir el descanso total del receptor.

Tumbado en el piso (sobre una superficie confortable, como un aislante o una colchoneta liviana), la persona irá tomando posiciones de estiramiento que faciliten el acceso del terapeuta a los meridianos (puntos de presión) y a los canales del lom.

El masaje tailandés no usa aceites ni piedras, sino simplemente las manos, brazos, codos, rodillas y pies del terapeuta para hacer los movimientos y la presión, y también los estiramientos asistidos que suelen asemejarse a las posturas del Yoga. Éstos se harán en todo el cuerpo y grupos musculares, incluyendo también las extremidades, facilitando la expulsión de energías negativas retenidas. Así, el terapeuta "empujará" el aire interno hacia la boca, los oídos, la nariz, la zona genital, las manos y los pies, entremezclando herramientas de dígito-puntura, quiropráctica y masajes musculares.

Masaje tailandés: Principios fundamentales y precauciones

Hay un listado de 10 principios fundamentales en el masaje tailandés. El primero habla de la concentración en la tarea por parte de ambos, "paciente" y "terapeuta". Se debe mantener el ritmo de respiración profunda y entregarnos en cuerpo y mente a la idea de alivio mediante la expulsión del aire y las energías acumuladas.

El siguiente principio es el de la aplicación: antes de cada movimiento o presión, el paciente inhalará profundamente y recibirá los movimientos mientras exhala (lentos, aunque fluidos y profundos). Recuerda que el masaje debe ir siempre en avance hacia los orificios y extremidades, mentalizándote en el alivio y en la curación mental y física.

Mantén el cuerpo relajado, respira profundamente, exhala lentamente mientras recibes los movimientos, la presión o los estiramientos. Conserva tus ojos cerrados para concentrarte mejor y evitar las distracciones.

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"El masaje tailandés no usa aceites ni piedras, sino simplemente las manos, brazos, codos, rodillas y pies del terapeuta."

Si eres quien hace el masaje, acompaña la respiración de quien lo recibe, inhala por la nariz y exhala por la nariz o por la boca, no hables, y concéntrate con energías positivas en la tarea en manos. Ten mucho cuidado con las zonas sensibles o con lesiones previas (hombros, rodillas, caderas) y no hagas fuerza ni presión profunda: debe ser un masaje relajante y placentero.

Puedes aprender a realizar estos masajes en una institución de tu ciudad, o también asistir como paciente a un centro especializado para armonizar tu cuerpo y tu mente. Así eliminarás dolores y malestares con estas simples pero muy efectivas técnicas de masaje tailandés.

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Nada más relajante que un masaje bien hecho. Pero hasta la más completa terapia puede ser inefectiva si acudes al encuentro tenso y sin estar listo para esta placentera experiencia. Por eso, y para que puedas relajar cuerpo y mente en esta deliciosa actividad, te proponemos estos consejos para prepararte antes de recibir masajes.

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