Consejos para mejorar la productividad organizando las tareas
Mantener un orden de tareas, tiempos y prioridades te ayudará a ser más productivo, y esto incluye desde que te levantas de la cama.
Presta atención a la cantidad y calidad del tiempo que dedicas a las tareas de base de tu día.
Tips para mejorar tu productividad
Cuando hablamos de productividad, de “hacer más y con menos”, seguro que el asunto de cuánto tiempo destinamos a cada tarea es algo fundamental. Es que incluso si tienes los conocimientos necesarios, las herramientas más eficaces y todo para ser productivo, si malgastas tu tiempo en lo que no se necesita, no sólo no legarás a la meta, sino que incluso pones en peligro el plan completo.
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Atiende tu dedicación
Presta atención a la cantidad y calidad del tiempo que dedicas a las tareas de base de tu día. No sólo a las específicas de tu actividad (tu trabajo, tus quehaceres, lo que sea), sino aquellas que son las que en verdad marcan el modo en el que avanzará tu día.
Por ejemplo, fíjate cómo comienzas la jornada: si despiertas de buen humor, si has tenido suficiente abrigo en la cama, si tu colchón favorece tu postura, si te levantas energizado y feliz: esto será clave para tener productividad en el resto del día.
"Fíjate cómo comienzas la jornada: si despiertas de buen humor, si te levantas energizado y feliz: esto será clave para tener productividad en el resto del día."
En cambio, si despiertas adolorido, enfadado, físicamente enfermo, emocionalmente poco predispuesto, lo más probable es que no importa cuánto te esmeres ni cuántos conocimiento hayas adquirido para hacer tu trabajo, pues estarás casi predestinado a carecer de tu óptima productividad ese día.
Buenas acciones para tu productividad diaria
Otros asuntos a los que debes prestar atención para elevar tu productividad y realizar así una mejor planificación de tu día es, virtualmente, todo aquello que te prepara para la jornada. Algunas maneras de efectivizar tu manejo de tiempo son:
- Antes de ir a dormir, prepara la ropa que usarás en la jornada siguiente. Plánchala y déjala lista para vestir. Tener este asunto resuelto cuando salgas de la cama te será muy satisfactorio.
- Del mismo modo, piensa qué desayunarás en la mañana siguiente, y deja al menos los utensilios listos (la taza, la cuchara, etc.), programa la cafetera, y deja todo lo que sea no comestible (o no esté en un envase bien cerrado, como podrían estar el azúcar, el sirope, etc.) en la encimera o en la mesa. Esto, en la próxima mañana, te animará a desayunar completo, sin perder tiempo y preparándote mejor para la jornada.
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"Antes de ir a dormir, prepara la ropa que usarás en la jornada siguiente. Tener este asunto resuelto cuando salgas de la cama te será muy satisfactorio."
- En el camino al trabajo, planifica las tareas que tienes para ese día. Si aún no las conoces, entonces piensa lo que debes hacer al salir de trabajo. Y si no tienes nada, usa ese tiempo para planificar tu fin de semana. Pensar de antemano lo que necesitamos hacer nos da una mejor visión sobre el plan general y sus pasos específicos, y esta es la clave para elevar nuestra productividad y hacer un uso mucho más eficiente de nuestro tiempo.
- Por último, conócete y comprende tus propias necesidades y tus limitaciones, tanto las naturales e inherentes, como también las que se dan por carencia (de conocimientos, de mecánicas, o por lo que fuera).
