Tipos de Moldes para Cocinar: ¿Cómo Elegirlos?
Aprende a elegir el molde correcto para cada una de tus recetas. ¡Si escoges el adecuado lograrás platillos en su punto justo!
© Depositphotos.com/vi-mart
Para saber qué molde usar, define qué resultado buscas: cortezas crocantes, preparaciones húmedas, etc.
¿Qué Molde Usar para cada Receta?
¿Conoces los distintos tipos de moldes y cuál debes usar para hornear pasteles, carnes, pinchos o vegetales?. Muchas veces vemos en las recetas que sugieren el uso de uno en especial. La elección no es por capricho: cada recipiente reacciona de una cierta manera con los ingredientes, tiene sus condiciones de distribución del calor y, en base a ello, también resulta más adecuado para un cierto tamaño de las preparaciones.
También te puede interesar...
Cómo reemplazar la manteca al enmantecar moldes
Al elegir el molde para cocinar cada tipo de platillo, ten en cuenta estos consejos:
Moldes metálicos
Los hay delgados, livianos, gruesos y pesados, y pueden ser de aleaciones metálicas, de cobre, de acero inoxidable, de hierro fundido y de aluminio. Asegúrate de que no tenga asas u otros elementos no aptos para el horno. El metal es el mejor conductor de la temperatura, y es la mejor elección para las cocciones a fuego alto.
Este tipo de molde permite preparaciones secas y crocantes, por ejemplo, las masas de tartas y pasteles, las carnes y otros. Ten en cuenta las instrucciones de la receta para saber si necesitas uno con bordes: estos no siempre son para contener las comidas, también sirven como un emisor lateral de la temperatura de cocción para, por ejemplo, los cortes de carne. Puedes usarlos en horno y en hornalla, pero no en el microondas (en la mayoría de los casos)
"Tener la base y los lados de los moldes limpios y sin quemaduras te asegurará una cocción pareja, y una mejor distribución de la temperatura."
Asegúrate que el tipo de molde que vayas a usar no tenga plásticos u otras piezas que no soporten el calor.
© Depositphotos.com/belchonock
Moldes de cerámica
Los moldes cerámicos demoran un poco más en tomar temperatura, pero luego la mantienen por más tiempo. No soportan bien los cambios bruscos, por eso son adecuados para cocciones a temperaturas medias y bajas, y debes retirarlos hacia una base de madera o similar, y no hacia la piedra directamente, pues podrían quebrarse. Nunca les pongas agua fría cuando estén muy calientes.
Son ideales para estofados y cocciones lentas, también adecuados para cocciones húmedas que no requieran de crear cortezas o bases secas, y soportan a la perfección las preparaciones ácidas. Ya que conservan bien la temperatura, debes retirarlos del horno unos minutos antes de terminar la cocción, pues en caso contrario podrías quemar las comidas. Puedes usarlos en horno, microondas y hornallas sin problemas.
Cocinar con moldes de vidrio
Al igual que los cerámicos, demoran algo más en tomar temperatura, y la conservan más tiempo que el metal, pero menos que los cerámicos. También debes evitar someterlos a cambios bruscos, llevarlos al horno no tan caliente, usarlos para cocciones a fuego medio o bajo, y al retirarlos, posarlos sobre una superficie cálida, como una madera. Tampoco los agregues agua fría cuando estén calientes.
También te puede interesar...
Moldes para hacer Huevos Fritos de Diferentes Formas
Son ideales para preparaciones líquidas y húmedas, también para salsas, pues conservan una temperatura estable en todo su interior, incluso mejor que los cerámicos. También soportan bien los ingredientes ácidos sin reaccionar, a diferencia de los metálicos, y puedes retirarlos del horno antes de terminar la cocción y cubrirlos para terminar fuera. Puedes usarlos en horno y en microondas.
Cómo usar moldes de silicona
En estos tiempos, cocinar con moldes de silicona se está volviendo una constante. Son seguros, soportan bien el calor y los cambios bruscos de temperatura, y además son antiadherentes y facilitan el desmolde, lo que los hace ideales para masas, tartas, pasteles y panificados de todo tipo, sin mencionar que puedes usarlos tanto para el horno como para el microondas y hasta para el refrigerador y el congelador.
Pero ya que no son buenos conductores del calor, no lograrán cortezas y bases secas, mientras que sí son geniales para cocciones prolongadas, pues demoran algo en tomar temperatura, aunque no la mantienen por demasiado tiempo una vez fuera del calor. Puedes usarlos en horno y microondas, pero no a fuego directo (hornallas).
Moldes de melanina
Al igual que los platos, tazas y cubiertos, los moldes de melanina y los plásticos no son aptos para el calor. Úsalos para preparaciones frías, y nunca les agregues ingredientes calientes por encima o dentro. Este material no sólo no resiste la alta temperatura, sino que al contacto con alimentos calientes puede tener consecuencias severas en tu salud.
"Cada tipo de molde reacciona de una cierta manera con los ingredientes, tiene sus condiciones de distribución del calor y, en base a ello, también resulta más adecuado para un cierto tamaño de las preparaciones."
Además de elegir el tipo de molde a usar, el truco está en mantenerlos en el mejor estado posible. Luego de cocinar, y con el recipiente aún caliente (aunque no demasiado, en especial los de cerámica y los de vidrio) ponles agua para dejarlos en remojo y despegar cualquier resto adherido de comida. Al lavarlos, usa jabón neutro y agua caliente, y asegúrate de dejar el exterior impecable.
Sigue estos consejos y sabrás con precisión qué molde elegir para cocinar, para que todas tus preparaciones resulten maravillosas, saludables, ¡y apetitosas!.
