Cómo limpiar un rodillo

Consejos para limpiar los rodillos

Si al terminar de pintar alguna superficie, o durante la espera del secado de la primera mano de pintura, dejamos nuestro rodillo al aire y sin limpiarlo, seguramente al querer volver a utilizarlo nos encontraremos con un instrumento totalmente inservible.

Limpiarlo solo nos llevara unos momentos, nos ahorrará dinero y nos permitirá alargar la vida útil del mismo

"El rodillo es un elemento que nos permite ahorrar tiempo en el pintado de grandes superficies y lograr un acabado liso y uniforme."

Pintura al agua

En el caso de haber utilizado pinturas al agua o látex, su limpieza es muy sencilla.

Primero deberemos retirar todo el excedente de pintura de rodillo, haciendo girar el mismo sobre la hoja de un diario o periódico. Luego, los lavaremos con abundante agua hasta eliminar todo rastro de pintura, apretando con las manos hasta que el agua salga limpia.

Posteriormente, dejaremos secar el rodillo colgado de la pileta o de alguna soga (la soga de la ropa es perfecta para este momento) hasta que esté completamente seco.

Para que no se deforme, lo ideal es guardarlo colgado y envuelto en papel film o una bolsa de plástico para evitar que su superficie se llene de polvo.

Pintura sintética (o cualquier pintura que no se pueda limpiar con agua)

Si estamos utilizando alguna clase de pintura que necesita de algún tipo de limpiador o disolvente especial, su limpieza no se diferencia mucho de la anterior.

Igualmente descargaremos toda la pintura que tiene pasando con fuerza el rodillo sobre un periódico o diario.

Luego, colocaremos el rodillo en el disolvente específico para la pintura utilizada y como en el caso anterior, apretaremos con las manos para que quede bien limpio. La diferencia radica en que en este caso, deberemos proteger nuestras manos con guantes de látex o hule, para que el producto no nos produzca irritaciones.

En ambos casos