Cómo eliminar plagas desconocidas del jardín
Sabemos que algún bicho maligno anda merodeando nuestro jardín, pero no logramos identificarlo. Para estos casos, es mejor actuar con elementos naturales hasta reconocer al agresor.
Recetas naturales para quitar plagas del jardín
Si cuidando de tu jardín te encuentras con las inequívocas señales de pestes y amenazas, seguro que quieres darle fin al asunto cuanto antes.
Ya vimos diversas soluciones naturales para eliminar plagas comunes, pero.. ¿qué pasa con aquellas que cuesta identificar?. En estos casos, no podemos actuar a ciegas, ya que la potencial solución podría simplemente empeorar el asunto.
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Remedio Casero para Eliminar las Plagas del Jardín
Lo mejor es olvidarse de trampas y venenos específicos, y optar por las soluciones más naturales, hasta lograr deshacerte del problema o, en ocasiones, lograr identificar al agresor, para poder darle una solución más específica y efectiva al asunto.
Soluciones naturales para quitar plagas del jardín
Cuando encuentres las señales de plagas en el jardín, un truco muy sencillo es aprovechar los envases plásticos descartables de bebidas como tu arma de defensa. Perfora su tapa para crear un rociador de gran cobertura, y llénalo con una solución preparada con agua caliente, cuatro a cinco cebollas (cortadas en trozos grandes, segundos antes de colocarlas en el agua) y dientes de ajo machacados con todo y piel.
Cuando la solución haya enfriado, aprieta la botella en dirección a las plantas, rociándolas por completo. Esto no las dañará, pero sí ahuyentará a los ocultos invasores.
Cuando se trate de una planta específica, puedes optar por mezclar una cucharadita de limpiador para pisos (de preferencia uno biodegradable y natural) en un litro de agua. Con un trapito o algodón, humedece la cara superior de las hojas de la planta afectada por las plagas. En uno o dos días los invasores deberían desaparecer. Luego, limpia la planta con agua clara.
"Lo mejor es olvidarse de trampas y venenos específicos, y optar por las soluciones más naturales, hasta lograr deshacerte del problema."
El tabaco es un gran enemigo de nuestra salud, pero es también un gran aliado en el cuidado del jardín. Adquiere una cajetilla de cigarrillos y pícalos dentro de un cazo, incluyendo el papel y las hojas molidas de tabaco, pero sin los filtros. Agrega un litro de agua templada, y lleva al fuego lento hasta que hierva. Luego de dejar enfriar a la perfección (con cuidado de que no toque tus manos, pues podría ocasionarte manchas y olores desagradables) cuela la mezcla, reservando sólo el agua. El tabaco puede ser reutilizado para hacer compost casero en un recipiente. Usa este líquido para rociar tus plantas, tanto las afectadas como también las sanas: será sumamente efectivo para ahuyentar a las plagas desconocidas.
Finalmente, el truco es observar. Si logras identificar con precisión al atacante oculto de tus plantas, procura una solución más puntual. Siempre elige fertilizantes naturales, sin químicos ni agentes agresivos, para favorecer el bienestar de tu jardín.
