Aprendiendo a oler un vino

El aroma del vino es una de las características mas apreciables, pero para aprender a destacarlo debemos entrenar nuestro olfato con mucha práctica y paciencia.

Aprendiendo a oler un vino

Cómo aprender a oler un vino

Por Alberto Martínez, para Uvinum

El sentido que se solicita más cuando se cata un vino es el olfato. Si quieres comprar vino para catarlo, tu sentido del olfato tiene que estar preparado para que la fase olfativa sea provechosa. Esto no se consigue fácilmente, y no basta ser un aficionado y oler un vino tinto o blanco una vez al mes.

No hay muchas formas de entrenarse: la única manera de hacerlo es oler, y oler otra vez, hasta cansarse de hacerlo, teniendo en mente los diferentes aromas... y esto se estudia. Así que saca tus accesorios, como por ejemplo la Lámina Drop-Stop + Termómetro, y ¡adelante!

"El sentido que se solicita más cuando se cata un vino es el olfato."

Cómo entrenar el olfato para catar un vino

La gran parte de los olores que encontraremos en los vinos suelen existir dentro de nuestra vida cotidiana. Entrenarse es importante, pero no debe ser complicado. Lo que se necesita es un poco de concentración, perseverancia e insistencia. Hay que ser atento a lo que olemos en nuestra vida diaria, fuera o en casa, particularmente dentro de la cocina.

Una cosa importante a la cual se tiene que prestar atención es el hecho de que una respiración básica solo te hace descubrir los aromas diluidos. Por esto, para oler vino hay que hacer inspiraciones profundas y largas, y siendo muy atento. Además, el olfato se puede cansar bastante rápido. No se debe repetir esta acción más de 2 o 3 veces. En casa podemos entrenarnos con esta pequeña guía de los olores de un vino.

"Para oler vino hay que hacer inspiraciones profundas y largas, y siendo muy atento, sin repetir esta acción más de dos o tres veces."

Tipos de aromas de un vino

  • Los esenciales: Estos olores son los frutales, florales, y también vegetales. Aquí se incluye también los de las hierbas y especias.
  • Los químicos: Esta categoría de olores abarcan el ácido acético como el vinagre, acetato de etilo, tipo esmalte y quita-esmalte de uñas, el diacetilo, el aroma de la margarina, un poco el olor de la manteca, anhídrido sulfuroso, algo así como huevos podridos, alcohol etílico o etanol.
  • Los florales: Rosa, violeta, jazmín, geranio, azahares cítricos. Estos olores se diferencian bastante bien entre sí.
  • Los frutales: Manzana, durazno, pera, limón, pomelo, ananá, frutilla, banana, uva, ciruela, cereza.
  • Los vegetales: Ajo, cebolla, pimiento rojo y verde, espárrago, aceitunas verdes y negras, hongos.
  • Las hierbas y especias: Canela, clavo de olor, pimienta, menta.