Cómo cocinar pastas rellenas

Las pastas rellenas se disfrutarán mejor si las cocinamos como corresponde, para evitar que se desarmen y conserven su atractiva forma. Conozcamos algunos secretos para lograrlo.

Cómo cocinar las pastas rellenas.

Consejos para cocinar pastas rellenas.

Consejos para cocinar pastas rellenas

Un domingo en familia, una cena con amigos, un agasajo en pareja: las pastas rellenas son el menú ideal para cumplir con aquello de "panza llena, corazón contento". Sin embargo, debemos cumplir con algunos trucos para que su cocción sea perfecta.

Sean compradas o hechas en casa, las pastas rellenas han de estar frescas y bien separadas a la hora de cocinar. Mantenlas en la nevera hasta ese momento, espolvoreando con un poco de harina si las has hecho en casa, para evitar que se peguen entre sí al momento de la elaboración. Al estar frías nos aseguramos de darles una cocción pareja y evitamos que las burbujas de la ebullición las desarmen.

El agua de cocción debe ser siempre abundante. Se recomienda un litro de agua por cada 100 gramos de pastas. La olla debe ser espaciosa, y el nivel del agua de cocción de unos 10 cm.
Pero lo verdaderamente importante es que las pastas tengan suficiente espacio hacia los lados, en lugar de quedar encimadas, pues esto obstaculiza la cocción pareja.

"Sean compradas o hechas en casa, las pastas rellenas han de estar frescas y bien separadas a la hora de cocinar."

Cómo cocinar las pastas rellenas

  • Agrega el agua fría a la olla y lleva al calor. Añade una cucharadita de sal por cada litro, y tapa para que rompa el hervor. No agregues nada, sino que será mejor colocar mantequilla, aceite de cualquier tipo u otros sabores una vez cocidas las pastas.
  • Después que el agua hierva (con burbujas grandes, como dirían las abuelas), agrega lentamente las pastas rellenas. La mejor manera de hacerlo es tomar algunas unidades con la espumadera y colocar suavemente en el agua, hundiendo el utensilio, en lugar de sólo echarlas allí dentro, pues el golpe podría desprender la masa y liberar el relleno.
  • Lleva el calor a moderado y deja cocinar hasta que notes que la masa se blanquea y las pastas comienzan a flotar. Puedes ir hundiéndolas suavemente con la espumadera, asegurando una cocción completa y pareja.
  • Una vez que todas las pastas floten y se vean de un color blanco y parejo, retíralas suavemente tomando algunas pocas unidades con la espumadera. Para ello, eleva para que escurra el agua excedente, y luego deposita con suavidad en la fuente, sobre la mantequilla o la salsa elegida. Retira todas, y una vez fuera, agrega sobre ellas la salsa (con cucharas, no violentamente), el queso rallado o el complemento que prefieras.
  • Con esta simple técnica las pastas rellenas se cuecen de manera pareja y no se rompen, conservando su relleno y el mejor aspecto para servir en la mesa.