Cómo evitar los Nervios en una Entrevista de Trabajo

Pocas veces logramos sentirnos cómodos en una entrevista de trabajo, por lo tanto, los siguientes consejos serán de gran utilidad para ocultar los nervios en ese momento.

Cómo evitar los Nervios en una Entrevista de Trabajo

Los nervios en la entrevista de trabajo. Claves para eliminar los nervios en la entrevista.

Los nervios en la entrevista de trabajo

Hemos hablado mucho sobre cómo actuar, qué responder y cómo prepararse para una entrevista de trabajo. Sin embargo, a veces los nervios terminan por traicionarnos, y caemos a su merced, intentando arruinar nuestras oportunidades. Para evitar exhibirlos ante nuestros potenciales empleadores, acá te mostramos algunos trucos y consejos útiles.

"No te muestres demasiado serio ni demasiado confiado, sino intenta mantenerte en una zona segura para evitar exhibir tus nervios."

Claves para eliminar los nervios en la entrevista

La preparación. Vístete con ropa que te sienta bien, que te sea confortable y que resalte tus atributos. En lo posible, trata de que se trate de una apariencia seria y responsable, claro, pero es imprescindible que no tengas inconformidad con tu atuendo. Si los tacos que le van bien a esa prenda te hacen doler, entonces cambia por otras opciones. Si esa camisa te aprieta mucho el cuello, cambia la camisa. Es importante estar cómodo, prolijo, bien peinado y con un aspecto cuidado.

La presentación. Tal y como en un encuentro social, en una entrevista de trabajo presentarte con una sonrisa es un paso importante para entrar por la puerta grande. Olvidate de tus problemas y de tus necesidades y urgencias por un momento, y concéntrate en lo que te haga feliz. Luego, entrá a la entrevista, y preséntate con una sonrisa y con un apretón de manos firme y certero. Debemos intentar presentarnos confiados, pero si verdaderamente no te sientes así, esta tarea te va a ser casi imposible. Es mejor, entonces, presentarnos contentos.

La disposición. Debemos mostrarle al entrevistador que tenemos entusiasmo por estar allí, y que queremos ser parte de la organización, aunque sin mostrarnos desesperados. Siéntate en una posición erguida aunque cómoda, relaja las manos y los pies para evitar mostrar nervios, y mantén contacto visual, aunque con pequeños cortes aquí y allá para no mostrarte demasiado agresivo. Si tienes nervios y te tiemblan las manos, procura cruzar los dedos y reposarlas sobre tu falda. No te lleves las manos al bolsillo, en cambio intenta quizás tomar una lapicera o un objeto durante un momento breve (muévela de lugar, por ejemplo) para tranquilizar los nervios.

El comportamiento. Ningún exceso es bueno. No te muestres demasiado serio ni demasiado confiado, sino intenta mantenerte en una zona segura para evitar exhibir tus nervios. No grites ni alces la voz, y si te ríes que sea con una risa agraciada, y no con una carcajada.

"Al Ingresar a la entrevista, deja de lado tus preocupaciones y concéntrate en lo que te haga feliz."

Finalmente, cuidado con las charlas: a veces en busca de la comodidad nos dejamos tentar por la conversación, y terminamos por decir cosas inoportunas, como hablar mal de nuestros antiguos empleadores o revelar nuestra desesperación. Mantén la charla de manera cuidada, y si es necesario, cambia de tema sutilmente hacia uno que te haga sentir más confiado y cómodo, para no demostrar tu nerviosismo.