Cómo alimentarse antes de una exigencia física o mental

Si se avecinan días complicados a nivel físico o mental, debemos darle a nuestro cuerpo las energías necesarias para sobrellevar la situación. Una buena alimentación será fundamental.

Cómo alimentarse antes de una exigencia física o mental

Ideas para alimentarse adecuadamente

Si estás por comenzar una actividad física exigente, o si se avecinan días de sobre exigencias emocionales y mentales, lo mejor que puedes hacer es preparar a tu cuerpo con una alimentación adecuada, para dejarlo en su punto óptimo y le otorgue las energías necesarias para hacerse cargo de las tareas que vendrán.

Una alimentación adecuada te va a permitir evitar la fatiga, el estrés, y tener el cuerpo más fortalecido y mejor predispuesto para las labores. La idea es poner en marcha esta dieta saludable antes de mudanzas, cambios de trabajo, modificaciones en la familia u otras situaciones particulares.

Cómo alimentarse antes de una exigencia física o mental

  • Los días previos a los grandes cambios y exigencias físicas y emocionales no son los ideales para comenzar dietas restrictivas. Lo mejor es comer alimentos y platos completos, bien balanceados y en cantidades adecuadas.
    Comienza cada día con una pieza de fruta rica en vitaminas, con cereales y con lácteos, si son de tu preferencia, o con infusiones y zumos naturales, para comenzar la jornada bien despierto y atento, energizado y listo para todo.
  • Para estar fortalecidos y atentos, es vital una alimentación completa, con buena carga de vitaminas, proteínas y minerales es vital.
    Luego de un desayuno energético, toma una colación a media mañana (algo que te suba las energías, como algún yogur, una fruta), y no te olvides de un almuerzo bien completo, con lácteos, huevos, carnes y al menos tres variedades de vegetales, en porciones reducidas, para optimizar el metabolismo y aprovechar los nutrientes.
  • Para una buena alimentación previa a días de exigencias, es preferible evitar el consumo excesivo de cafeína y de infusiones de altos contenidos de esta sustancia. No dejes de tomar café si es lo que te place, pero limitate a no más de dos tazas diarias.
    Si estás acostumbrado a un consumo mayor, remplázalo por té verde, que te mantendrá atento e hidratado.
  • En lugar de gaseosas, elige los jugos naturales; son más saludables, satisfacen el gusto por lo dulce, y te dejan bien despierto y con el cuerpo limpio y revitalizado.
    En lugar de panificados ricos en grasas y golosinas, para las colaciones escoge frutas, barras de cereal o frutas secas.
  • Por último, para completar la alimentación antes de una exigencia física o mental, hay que incorporar muchos vasos de agua diarios. Es necesario beber hasta dos litros de agua por día, para ayudar al cuerpo a eliminar las impurezas y para mantenernos hidratados y saludables.
    Acompaña tus comidas y colaciones con un gran y refrescante vaso de agua y notarás la diferencia en pocos días.