Cómo lograr un falso empapelado en las paredes

El faso empapelado es un truco de decoración que nos permite dissoner de una opción más económica y original

Cómo lograr un falso empapelado en las paredes

Falso empapelado

El empapelado puede ayudarnos a dar una apariencia completamente renovada a nuestro hogar, en especial cuando tenemos paredes con detalles o texturas no deseadas, o simplemente cuando no logramos hallar inspiración respecto del color que queremos dar a ese ambiente, y simplemente nos enamoramos del patrón de un empapelado en particular.

Pero el empapelado, a veces, resulta demasiado costoso para su aplicación en paredes de grandes dimensiones, o tal vez nos ocurra que no logramos encontrar en el mercado un diseño en papel que sea como el que esperamos tener. Es entonces cuando ponemos en práctica un truco de decoración: el falso empapelado.

"El empapelado puede ayudarnos a dar una apariencia completamente renovada a nuestro hogar, en especial cuando tenemos paredes con detalles o texturas no deseadas."

Ideas para realizar un falso empapelado

Para hacerlo tan sólo debemos tener algo de ingenio, quizás de técnica, y mucha creatividad. En primer lugar, tenemos el empapelado original que se realiza mediante la aplicación de elementos similares al papel de paredes, aunque a veces no sea tan semejante como imaginamos, pero que logran dar una apariencia única a nuestros ambientes.

Se trata de la aplicación de diversos elementos planos a modo de papel. Podría ser hojas del periódico que tenemos guardado en el sótano, o bien las inigualables hojas amarillentas de libros que han perdido su esplendor. Claro, podría también tratarse de virtualmente cualquier papel que nos guste en su diseño: afiches, pósters, papeles de regalo, hojas de revista... cualquier elemento plano servirá. Para hacerlo, tan sólo preparamos las paredes, lijándolas y limpiándolas, y vamos aplicando pegamento de empapelar por trozos de superficie (para que no se seque), y vamos apoyando cuidadosamente las hojas o papeles, cubriéndolos con una nueva capa de pegamento para protegerlo. Debemos utilizar la ayuda de una escobeta de goma, para eliminar las burbujas de aire que pudieran quedar atrapadas, tal y como haríamos con el papel convencional.

Otra buena técnica es la del falso empapelado, utilizando pintura. En primer lugar, definimos el diseño que deseamos lograr, quizás incluyendo stencils o moldes de pintura. Primero damos una base blanca, luego creamos el fondo general (con la técnica y estilo que más nos apetezca, como esponjeado, con bolsas, con rodillos texturados), y luego aplicamos los moldes o pintamos libremente, siguiendo un patrón o diseño. Claro, para dar la sensación de empapelado rústico, podemos incluso lograr las marcas verticales (que simulan el corte de las hojas de papel) con la técnica de flotado, y un poco de paciencia.