Como elegir a un profesor de idiomas

El profesor ideal depende de lo que queremos lograr con este aprendizaje

Como elegir a un profesor de idiomas

Cuando tomamos la decisión de contratar a un profesor particular de idiomas, ya sea para tomar una clase particular individual o para aprender entre un pequeño grupo de amigos o parientes, debemos prestar atención a quien sea el contratado para la enseñanza. Y esto no es en vano ni por capricho: un profesor que no motive a sus alumnos, ni les brinde los conocimientos deseados y los necesarios, puede terminar por eliminarnos ese deseo de aprender que teníamos en un comienzo.

Para elegir a un buen profesor necesitamos, antes que todo, definir qué es lo que queremos lograr con este aprendizaje. Si lo que deseamos es aprender algunos consejos básicos de comunicación para poder defendernos en nuestro próximo destino vacacional, entonces quizás sólo necesitemos a un profesor que podría ser un estudiante, o alguien que recién comienza con sus labores de enseñanza.

Por otra parte, si queremos aprender a conversar en el idioma escogido, como para poder dialogar de temas sencillos con extranjeros, o entender las letras de las canciones que nos gusta oír en la radio, bien podemos contratar los servicios de un idóneo en esta lengua, quizás alguien que haya vivido en un país del lenguaje escogido, aunque no se trate de un profesor en el sentido exacto de la palabra.

Una persona que sepa hablar el idioma de manera coloquial podrá asistirnos en esta tarea, y logrará transmitirnos sus conocimientos de un uso cotidiano de las palabras, como para poder utilizar la lengua aunque no sea de la manera más formal y correcta a nivel gramatical. Pero si, por el contrario, deseamos aprender un idioma con miras a dominarlos e intentando perfeccionar nuestra técnica, entonces lo más apropiado será contratar a un profesor con fuertes antecedentes académicos y literarios en la lengua seleccionada.

Y sin importar la intención de uso que persigamos, cualquier profesor escogido deberá cumplir con ciertas características. Debe, en primera instancia, conocer la lengua en profundidad, y disponer de las técnicas de enseñanza más apropiadas para la clase en cuestión. Debe ser alguien que logre elevar nuestro entusiasmo hacia el aprendizaje, y debe contar con la paciencia indicada como para respetar la velocidad de este aprendizaje, especialmente cuando los alumnos superan la edad escolar, quienes probablemente hace tiempo ya dejaron de tener un ritmo específico de estudios.