Cómo hacer Jabón de Gelatina

Aprende a fabricar un jabón casero blando usando gelatina, para obsequiar o para divertir a tus niños a la hora del baño.

Cómo preparar jabón de gelatina casero. Receta para hacer jabón de gelatina. Cómo hacer un jabón con gelatina en casa

El jabón de gelatina mantendrá su forma, pero al tomarlo lo notarás blando y suave. ¡Los niños adorarán tomar un baño con este producto casero!

Cómo Fabricar un Jabón con Gelatina

El jabón de gelatina es la nueva tendencia en productos de higiene y cosmética, también conocido como “jabón de goma” o “jabón blando”.

Se trata de un muy eficiente jabón de tocador o para la ducha, con una particularidad: es blando, suave y gelatinoso, lo que le da un giro divertido a su uso tanto por parte de los niños como también de los mayores.

"A los niños les encantará usar este jabón de gelatina ya que es blandito y flexible, y tu piel lo sentirá de maravillas."

Lista de materiales e ingredientes

Para hacer jabón casero de gelatina necesitas estos ingredientes:

  • 450 cm3 (unas 16 onzas) de gelatina sin sabor
  • 1 cucharada de sal fina
  • ¾ taza de agua hirviendo
  • ½ taza de jabón líquido – el que prefieras y que vaya mejor con tu piel
  • Opcional: colorante para jabones, aromatizante, glitter para el cuerpo, flores de lavanda secas, avena, café molido, o lo que prefieras usar para personalizar

En cuanto a los materiales, necesitarás:

Ingredientes para preparar jabón de gelatina. Pasos para fabricar un jabón casero de gelatina.

Usa jabón líquido incoloro para obtener pastillas de jabón transparentes. ¡Ideales para poner pétalos dentro!

© Depositphotos.com/agneskantaruk

  • Jarras y elementos de medición
  • Un cuenco o bol apto para altas temperaturas
  • Desmoldante para jabones (opcional)
  • Moldes
  • Una espátula o cuchara de madera

Pasos para preparar jabón casero de gelatina

1. En el bol, pon la gelatina sin sabor en polvo, mezcla con la sal fina, y agrega el agua hirviendo. Revuelve para disolver a la perfección.

2. Ya con todo bien disuelto, añade el jabón líquido. Puedes usar el que prefieras y que vaya mejor con tu tipo de piel. También elige uno con una fragancia agradable, o con un color que te guste. Revuelve muy bien, sin batir, hasta que la preparación se integre bien en una pasta uniforme.

3. Es el momento de la personalización. Agrega una cucharadita de brillo para el cuerpo, unas dos o tres gotas de colorante para jabones, una esencia para jabones cuya fragancia te agrade, o lo que quieras. Otra opción es añadir flores secas de lavanda, una cucharadita de avena, una cucharadita de poso de café molido u otras, para aprovechar sus aportes y darle más encanto. Sólo asegúrate de que no sean elementos que luego raspen tu piel.

4. Rocía los moldes con desmoldante, si fuera necesario, y vierte la preparación en cada espacio. Usa moldes para jabones o de silicona resistentes al calor, pues los rígidos impiden luego el desmoldado.

5. Lleva al refrigerador por unas dos horas, más si lo necesitas, hasta que al tocar la superficie esté “firme” y con la textura de una gelatina bien cuajada.

6. Retira del frío y desmolda el jabón en un trozo de papel de hornear, para permitir que cuaje la superficie que estaba en contacto con el molde.

"Aunque la sal aporta firmeza la base de gelatina puede ablandarse cuando lo expongas al calor extremo; si esto sucede, coloca el jabón en el frío por unos minutos."

Ya está listo para usarse o para envolver en papel celofán y usar como un original presente para cualquier ocasión. A los niños les encantará usarlo ya que es blandito y flexible, y tu piel lo sentirá de maravillas.

Ten en cuenta que aunque la sal aporta firmeza, la base de gelatina puede ablandarse cuando lo expongas al calor extremo; si esto sucede, sólo pon este jabón casero de gelatina en el frío por unos minutos y recuperará todo su esplendor.