Cómo hacer un limpiador de alfombras casero
Te presentamos dos versiones de limpiador casero para alfombras, una en polvo y otra líquida. Puedes combinarlas para dejar tus moquetas y tejidos como nuevos.
Limpiadores caseros para renovar nuestra alfombra.
Dos recetas de limpiador de alfombras
Limpiar las alfombras en hogares con muchos ocupantes o con mascotas puede ser un verdadero desafío. Las fibras acumulan suciedades, las salpicaduras quedan impregnadas, y los colores de los tejidos van perdiendo su encanto. Pensamos que la única alternativa es contratar los servicios de una costosa empresa de mantenimiento... pero no es así.
Aquí aprenderemos a crear dos versiones de un limpiador de alfombras casero sumamente eficaz y totalmente natural, que no sólo las dejará como nuevas, sino que además las cuidará junto con su entorno.
"Para tejidos que hace tiempo no se limpian y tienen manchas puntuales, aprovecha el limpiador casero en polvo."
Limpiador líquido casero para alfombras
Esta es la versión líquida del limpiador.
- Para hacerla, mezcla en un balde o en un bol grande una cucharadita de bicarbonato de sodio y una cucharada de detergente líquido para la vajilla. Luego agrega, lentamente, una taza de agua tibia mezclada con una cucharada de vinagre blanco de alcohol.
- Remueve para integrar, con cuidado por la reacción burbujeante que se puede producir al mezclar vinagre con bicarbonato de sodio, y deja asentar hasta que notes la preparación fría. Entonces, envasa en una botella con pulverizador, y ya está listo para usar.
- Rocía con el líquido por sobre toda la superficie de la alfombra, sin mojarla, pero asegurándote de que quede húmeda. Deja actuar unos 20 a 30 minutos, y luego repasa con una esponja limpia, apenas humedecida con el producto. Puedes usar cepillos si prefieres.
- Finalmente, seca el excedente de agua con papeles absorbentes, y deja ventilar para que termine de evaporarse los líquidos. Tu alfombra quedará impecable, y sus colores como nuevos.
Limpiador en polvo para alfombras y moquetas
Para tejidos que hace tiempo no se limpian y tienen manchas puntuales, aprovecha este limpiador casero en polvo. Prepáralo mezclando en un bol grande lo siguiente:
- 2 tazas de bicarbonato de sodio
- 1/2 taza de fécula de maíz
- 1/2 taza de harina de maíz
- 4 hojas de laurel secas y trituradas
- 1 cucharada de clavo molido
- 1 cucharada de bórax (este ingrediente es opcional, aumenta el poder de limpieza pero puede ser agresivo con niños y mascotas)
Mezcla muy bien, disolviendo posibles grumos e integrando todos estos elementos; puedes hacerlo en la procesadora si prefieres. El bicarbonato y el bórax son agentes de limpieza profundos, también refrescarán y renovarán las fibras de la alfombra, mientras que el clavo y el laurel poseen efectiva acción antibacterial.
Ya bien mezclados, coloca todos los ingredientes en un envase de tamaño adecuado, con una tapa que permita espolvorear y otra de cierre completo, como un vejo envase de talco.
Para utilizar, simplemente espolvorea sobre la mancha o sobre toda la alfombra, deja actuar 30 a 35 minutos, y pasa un cepillo de cerdas medias en un mismo sentido, para no "despeinar" el tejido. El polvillo retirará toda la suciedad, y luego puedes aspirar para retirarla por completo.